[Reporte de vuelo] Buenos Aires – Madrid en un A340-600 de Iberia

Gastón Cáceres

Empiezo así un nuevo reporte de vuelo. Me motiva mucho hacerlo ya que es mi primer vuelo intercontinental, mi primer vuelo en Iberia y mi primer vuelo en un Airbus A340-600.

Las circunstancias del mismo no son muy gratas y seria largo de explicar, y además implicaría desvirtuar este reporte. Asi y todo me mentalicé a disfrutar de la experiencia.

Saque el pasaje 6 dias antes del viaje por lo más barato que encontré con el itinerario más razonable por ARS$17.432. Rechacé por algo más de ARS16.000 una opción en Air Europa ya que para llegar a mi destino final me ponían un tiempo total de 37Hs.

Mi destino final es Tel Aviv y mi itinerario será Buenos Aires/Ezeiza – Madrid/Barajas – Tel Aviv – Londres/Heathrow – Madrid/Barajas – Buenos Aires/Ezeiza.  Además de Iberia volaré en El Al y en British Airways.  Dada la duración del viaje y la falta de sueño estoy escribiendo este reporte prácticamente mientras transcurre este vuelo IB6856 aunque por momentos vuelvo a  párrafos anteriores para aclarar algunos conceptos o situaciones que se presentan relacionadas a cierto tema.

Llegue al Gate a lo último, prácticamente ya estaban voceando mi nombre los empleados de Iberia. Entre rápidamente al avión y había 4 o 5 oficiales de la PSA en la puerta, al final de la manga (¿es normal? ¿O están extraditando a alguien en este vuelo?).

Iberia - Reporte Gaston 01
Airbus A340-600 EC-JPU «Pio Baroja» de Iberia

 

Aunque ya había volado en aeronaves Airbus A340-200 y Airbus A340-300, me encontré con un avión enorme en su interior, muy espacioso y casi con olor a nuevo, impecable en todo sentido. Entiendo que su interior se renovó por
completo hace menos de un año, muy por contrario su exterior, donde salta a la vista su antigüedad por el estado de su pintura. Al ocupar mi asiento 20A lo primero que me sorprendió al ver por la ventana era el enorme tamaño de las RR TRENT 900; el asiento que parecía muy cómodo  y aun así lo siento después de más de 4 horas de estar sentado en él, aunque luego de sentir la butaca noto algo recurrente en los A340: parecería que la curvatura del fuselaje comienza muy pronto por lo que el asiento junto a la ventanilla te hace sentir que el techo/pared está demasiado cerca de tu cabeza, lo que resta sensación de amplitud y aumenta la de encierro y falta de espacio. Incluso los “nervios” que hay entre las ventanas restan el preciado espacio en clase turista, aunque el hecho de que mi asiento vecino el 20B esta vacío me ayuda a sentirme un poco mejor.

El sistema de entretenimiento es muy completo e imponente es la vista de la cámara exterior  situada en el timón de cola que se proyectaba en las pantallas comunes a todo el pasaje en cabina. En el  sistema de entretenimiento individual trate de ver la cámara exterior  sin éxito; le pregunte a una tripulante si se podía ver y me dijo que no sabía. Trató de ver si la encontraba pero no lo logró. Prometió que averiguaría y volvería, no lo hizo, otro tripulante me dijo si el comandante la apagó no podrás verla,  y si no “investiga tu a ver si la encuentras”.

En el asiento hay todo lo que se necesita para este tipo de vuelos largos, pantalla individual táctil de 9” y puerto USB para carga de Smartphones, y una toma tipo S-video (aunque no estoy muy seguro) .Algo que se agradece y mucho es la  toma de 110V entre los asientos (acepta prácticamente todo tipo de enchufes y esta abajo entre los dos asientos), ideal para tener la computadora  cargada y encendida todo el viaje y hacer este reporte en vivo!!! Mientras tomaba contacto con todo y me despedía de mi gente via Whatsapp llegó el anuncio de seguridad. e oyó el cierre de puertas y mi asiento contiguo el 20 B  vacío, un lujo para un viaje como este. Si duermo  tres horas seguidas  sería un triunfo de la Economy Cass.  Momento de pasar el celular a modo avión (y así se puede tener durante todo el vuelo).

La bolsa con la típica manta roja de IB y la almohadita con funda de tela y no frizelina como se ve comúnmente y audífonos de cortesía.

«¡Prensa!» decía una tripulante que pasó con un carro lleno de varios diarios de Argentina y de España, pensé en pedirle “El Pais” y enterarme que estaba pasando en la madre patria pero ella fue más rápida que mi pensamiento,  pasó tan rápido y si no le hacías señas para que notara tu interés en algo de ese carro no se detenía, no miraba a nadie la cara, me quede sin diario pero ya sé cómo es con el sistema Iberia. No estoy diciendo que fue descortés ni mucho menos pero parece que tienen cierto tiempo para ofrecer el diario y no puede ir mirando a uno por uno a la cara en un avión donde hay 300 personas en Economy.

Tras poco más de una hora de vuelo llegó el almuerzo. Las opciones eran carne  o pasta;  fui por pasta y si bien al principio vi la bandeja muy chica (me parecía igual a la que podía encontrar en un GRU-BOG por LAN), la verdad que  quede más que satisfecho. Incluso noté que la bandejita del plato principal era bastante más profunda de lo que parecía a simple vista –La ensalada de lechuga, tomate, aceite negro, pepino y camarones  tenía muy buen sabor y se notaba q la verdura era bastante fresca. La pasta (fideos tipo cinta, bien calientes) tenía una salsa de crema, jamón , champignones y camarones. No era un mazacote pero casi casi (una buena cantidad de crema la hizo zafar). De todos modos muy buen sabor,  la sal justa, mejor que bien. Completaba el menú una lata de Coca Cola Zero (bien por la lata  ya que un vaso de bebida es corto), un pan, un paquetito de galletas de agua, manteca (blandita y no una piedra)  y queso crema; cubiertos de metal garantizan disfrutar de la comida, sal, pimienta y una toallita para limpiarse las manos (mientras escribo esto veo por segunda vez a mi vecina “La gimnasta del 19E” que está haciendo ejercicios de elongación cual entrenamiento en los lagos de Palermo, y eso que aún no llevamos  dos horas de vuelo…..¿esta será de las que para ir en auto a la feliz desde CABA para 5 veces?).

Iberia - Reporte Gaston 25

El poste era como un mil hojas de un relleno que parecía ser dulce de leche y queso crema o algo asi. Buen sabor pero no valio la pena como para hacer el esfuerzo de terminarlo ya que con lo que había sangucheado en el lounge de Star Alliance (a pesar de estar en ayunas hasta ese momento)  y esto quede más que satisfecho. Aú  estaba acomodando  la bandeja para la acostumbrada foto cuando pasó un tripulante ofreciendo pan,  PAN! PAN! casi alzando la voz cual vendedor ambulante, a los tres minutos paso de nuevo MAS PAN! MAS PAN! el modus operandi, el mismo que la TCP del carro con la prensa: si no alzabas la mano casi ni te miraban. No había empezado a comer el postre que paso de nuevo ofreciendo café, luego te y repitió luego de 5 minutos con cada una de las mencionadas infusiones.

Unos 20 minutos después ya habían levantado el servicio sin ofrecer nada más. Me quede con ganas de un vaso de agua por lo que tendré que ir a buscarlo al fondo (recuerden que estoy haciendo este relato en el avión casi a medida que transcurre todo) y aunque la luz de los cinturones se encendió la gimnasta ahora quiere hacer barras paralelas sobre su apoya brazos… y la tripulación manda el mensaje de sentados y con los cinturones, y una TCP le pide que se siente -muchas gracias ya estaba a punto de romper el apoya brazos y  no quería una escala en San Pablo para que hagan bajar a los heridos.

Tras más de dos horas de vuelo llega el momento de ver una película. Elegí Grandes Héreos. Se apagan  todas las luces, una TCP me cierra las ventanas con su mano. Tal vez vio mi cara de pocos amigos y me dice  “para que veas mejor la pantalla”. La levanto un poquito, necesito saber qué está pasando afuera si o sí.

Ya cerca de Recife han transcurrido 4:30  horas de vuelo. La noche nos envuelve, hago las últimas fotos mientras se despide el continente. Jamás pasaran ofreciendo agua por lo que voy a buscarla y aprovecho a caminar un poquito.

20:30 hora de Buenos Aires. Van 6 horas de vuelo, se encienden las luces y hay un nuevo servicio que consta de un sandwich de miga de jamon y queso y solo agua o jugo para beber; no hay ni hielo y ni tampoco alcohol para descontento de los que creen que el alcohol ayuda en un viaje en avió. Ya se había anunciado que el servicio sería así antes de la partida en Buenos Aires pero aún así muchos miraban el sandwich con caras de ¿hoy es 28 de Diciembre?  Yo creo que dado que el vuelo parte a las 14:25 el servicio a la partida debería ser el sandwich (ya que mal o bien uno algo picotea antes de llegar al aeropuerto o en el aeropuerto) y sería mejor que a la noche uno tengo una “cena”  y no un sanguchito….¿mañana al llegar a las 6:00  tendré hambre? Aunque para mi cuerpo van a ser las 2:00….que lío que tengo. En media hora se dio el servicio a todo el avión, se recogió todo y se apagaron las luces nuevamente.

La velocidad con la que hacen las cosas en increíble; es eficiente el servicio pero por ahí choca un poquito que pasen tan a las corridas. Además de un vaso de jugo pido otro de agua para no tener que pararme después.

Iberia - Reporte Gaston 12

Son las 22:05 hora de Buenos Aires y ya van casi 7:30 desde la partida. A pesar de que veo en la cabina a muchos de campera o con la manta roja de Iberia yo tengo calor. Estamos casi en la vertical de Dakar (Senegal) y me empieza a incomodar trabajar con la computadora ya que mi vecina del 19A después que sirvieron el almuerzo tiro el asiento atrás y no lo movió de esa posición. Es momento de tratar de dormir un rato, ya que sé que el cansancio llegara más adelante.

Iberia - Reporte Gaston 13

Duermo unos 90 minutos y  las luces de la cabina se encienden por completo;  se acerca la hora de la llegada y no siento mucho el cansancio. Si bien estoy muy acostumbrado a viajar este es mi vuelo más largo y no ha sido una tortura, la ansiedad por llegar hacer que estos últimos minutos se hagan muy largos.

Iberia - Reporte Gaston 14

Ya estamos dejando el continente Africano,  el vuelo llegará unos 35 minutos antes de lo programado,  se sirve el desayuno que consta (Como diría Sir Chandler) de la famosa “Cajita infeliz” que traía una medialuna con jamón y queso, un pequeño muffing, una ensalada de fruta, un bon o bon, un vaso de agua. Había también café y té pero yo no bebo esas infusiones.

La tripulación a través de un gentil anuncio nos pide “colaboración” a la hora de entregar la cajita vacía. Así de rápido como se sirvió más rápido se recogió, creo que en 25 minutos se hizo toda la operación.

El momento de arribo se hace notar no solo por la preparación de la cabina por parte de la tripulación si no porque en el sistema de entretenimiento empieza a correr un video que muestra a qué terminal llegara nuestro vuelo (4S) y como esta se combina con las otras, además de informaciones útiles como de qué terminal sale tu vuelo de conexión de acuerdo a las letras con la que empieza tu número de puerta.

Ya iniciado el descenso se encienden las luces exteriores que iluminan los motores, y llega el momento del aterrizaje que fue impecable. Arribados al aeropuerto de Barajas después de once horas y veinticinco minutos , siento que quedé conforme con el confort del avión y el servicio a bordo aunque creo que si la atención fuese un poco más cálida, amable y no tan a las apuradas la experiencia de viaje se incrementaría de forma notoria.

Una última foto del avión antes de quedar sorprendido por la arquitectura y belleza de la T4S, aunque mi viaje aun no finaliza tengo una horas de relax por delante en este hermoso aeropuerto.

Pueden seguir el día a día de mis viajes en mi cuenta de https://twitter.com/Qualityman156.

1 comentario en «[Reporte de vuelo] Buenos Aires – Madrid en un A340-600 de Iberia»

  1. Hola. fijate que en la primera parte de la publicacion el texto se esconde detras de las columnas de publicidad de la derecha y no se puede leer. saludos

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