Bombardier recibió ayer un fuerte impulso en Le Bourget al anunciar la firma de una carta de intención de compra con la aerolínea india SpiceJet por hasta 50 aeronaves Q400, conformado por 25 pedidos en firme y 25 derechos de compra, valuadas en USD 1,7 mil millones a precio de lista.
Al respecto, el presidente de Bombardier Commercial Aircraft, Fred Cromer, destacó la importancia del pedido por cuanto permitirá potenciar la presencia del turbohélice en un mercado tan dinámico como el de Asia-Pacífico, más aún cuando también implicará el lanzamiento de la versión de alta densidad del Q400 en India, capaz de transportar hasta 86 pasajeros. «Esto evidencia que la demanda por aeronaves turbohélices se encuentra saludable en el mercado de corto a medio alcance que no pueden sostener económicamente la utilización de aeronaves jet cuyos costos de operación son superiores», dijo el ejecutivo.
Por su parte, el presidente de SpiceJet, Ajay Singh, mencionó que el pedido ayudará a mejorar la conectividad de ciudades más pequeñas, en alineación con la visión del gobierno de su país de que cada indio pueda volar.
SpiceJet opera la flota regional más grande de India, conformada por 20 aeronaves Q400 con una configuración de 78 asientos, a las cuales se suman 33 Boeing 737NG. Su red alcanza a 39 destinos domésticos y 7 internacionales, operando un promedio de 364 vuelos diarios.
A través de sus familias de turbohélices Q Series y jets regionales CRJ, Bombardier ha colocado en operación 190 aeronaves dentro de la región Asia-Pacífico, de las cuales 165 son turbohélices.