British Airways comunicó internamente esta semana la decisión de proceder al cierre de la base de tripulantes de cabina de pasajeros que posee en San Pablo, Brasil, conformada por unos 50 TCP.
La medida se hará efectiva a partir del 30 de septiembre de este año, replicando así lo anunciado en junio pasado cuando se anunció el cierre de la base de TCP en Buenos Aires en la que trabajarán, hasta el próximo 31 de julio, 18 personas. De esta manera en Latinoamérica sólo quedará activa la base de Ciudad de México.
Por cuestiones de costos British Airways ya había cerrado el año pasado su histórica base en Singapur. Desde la implementación de la categoría “mixed fleet” en 2011, para la compañía resulta más conveniente reclutar tripulantes con base en Londres, quienes tienen contratos laborales más flexibles. Esto ha traído múltiples conflictos laborales ya que califican que éstos proveen “salarios de pobreza”.
La aerolínea supo desplegar una gran red de bases de TCP alrededor del mundo con el objetivo de tener disponible para los clientes de esos países una atención culturalmente más aproximada a la de ellos. Pero eran otras épocas, y a veces para bien y a veces para mal, la aviación comercial sigue su evolución.
En el caso de nuestro país, tras el cierre de la base de British Airways, American Airlines será la única compañía extranjera en continuar empleando TCP argentinos basados en Buenos Aires (son alrededor de 130 personas).
