Para IAG (British Airways, Iberia, Aer Lingus y Vueling) el 2017 había terminado con una nueva victoria: el acuerdo para comprar los activos de NIKI, la aerolínea austriaca que dejó de operar en diciembre tras las turbulencias dejadas por el cierre de su compañía madre 45 días antes: AirBerlin.
Hasta incluso habían informado que sus planes eran hacer de NIKI una filial de Vueling para así incrementar su presencia en Austria, Alemania y Suiza.
Pero nada había sido cerrado definitivamente, y luego de que el 12 de enero una corte de Berlín dictaminara que la quiebra de NIKI debía tener lugar en Austria en vez de en Alemania, se reabrió el proceso de venta de sus activos con el 19 de enero como fecha límite para la presentación de ofertas por parte de los interesados.
Y, para sorpresa de todos (o de nadie), esta mañana se dio a conocer que el ganador del proceso había sido Laudamotion GmbH, compañía del ex campeón de Fórmula 1 Niki Lauda, quien precisamente renombrará a la aerolínea como Laudamotion, misma marca de una compañía de aviación ejecutiva que ya posee un certificado de operador aéreo, lo cual permitirá que la ex NIKI pueda reiniciar sus operaciones en marzo, de acuerdo a lo informado por el ex corredor al sitio web Air Transport World.
La nueva aerolínea tomará casi todos los 1.000 empleados de NIKI y quince aeronaves, pero no se conoció cuál fue el precio ofertado.
NIKI fue fundada en el año 2003 por Niki Lauda. En 2011 se completó su adquisición por parte del grupo Air Berlin, el cual la arrastró en su decadencia hasta que éste se declaró en bancarrota en agosto de 2017. Aunque Air Berlin dejó de operar el 28 de octubre, NIKI continuó volando mientras se negociaba su venta a Lufthansa, frenada luego de que se rumoreara que la Comisión Europea no aprobaría su fusión con la low cost Eurowings por cuestiones antimonopólicas. Ante esto, el 13 de diciembre NIKI se declaró en bancarrota y al otro día suspendió todas sus operaciones.
Tras conocer el resultado desde IAG emitieron un comunicado en el que dijeron «se sentían decepcionados de que NIKI no podrá desarrollarse y crecer fortalecida como parte del grupo»
