Como si la combinación de sobreexpansión long haul, los inconvenientes de los motores RR Trent de sus 787 y el grounding de los MAX no fuera suficiente, la pandemia del coronavirus COVID-19 se presentó como el último obstáculo que se le ha puesto en el camino a Norwegian. Y, así como al resto de la industria, ésta le ha propinado un golpe casi letal que la obligó a tomar decisiones drásticas para mantenerse a flote mientras sus acciones se vienen derrumbando casi un 80% durante el último mes.
La decisión informada anoche por el gobierno de Estados Unidos de prohibir vuelos provenientes de Europa ha empujado a que Norwegian decida dejar en tierra el 40% de su flota de larga distancia y canncelar hasta el 25% de sus vuelos de corta distancia hasta finales de mayo, lo que equivale a más de 4.000 operaciones.
Esta medida tendrá un impacto directo en sus empleados. La compañía estima suspender temporalmente hasta el 50% de sus empleados en diferentes sectores.
“Ésta es una situación sin precedentes y nuestra principal prioridad continúa siendo el cuidado y la seguridad de nuestros clientes y compañeros. Las nuevas restricciones han impuesto una mayor presión sobre una situación ya de por sí difícil. Instamos a los gobiernos internacionales a que actúen ahora para garantizar que la industria de la aviación pueda proteger sus empleos y continuar siendo una parte vital de la recuperación económica global”, expresó Jacob Schram, consejero delegado de Norwegian.
Norwegian cancelará entre el 13 y el 29 de marzo la mayoría de su vuelos que unen a los Estados Unidos con Barcelona, Madrid, Oslo, Ámsterdam, Estocolmo y París (la cancelación será total a partir del 29 de marzo y hasta fines de abril). En el caso de Roma, la suspensión llegará hasta finales de mayo.
Las rutas desde Londres/Gatwick seguirán operando con normalidad.
La red intraeuropea también se ha visto afectada, y por eso Norwegian cancelará gran parte de sus vuelos domésticos en Noruega y la región escandinava. También se levantarán los vuelos a Italia.
Noruega al rescate
Ayer el gobierno noruego había anunciado que planea ayudar a que las aerolíneas de su país logren financiamiento para mantenerse en operación, lo cual incluye tanto a Norwegian como a SAS y Wilderoe, entre otras.
«Queremos ejecutar medidas específicas que aseguren que las aerolíneas tengan liquidez para operar», expresó ayer Erna Solberg, primera ministra del país. Las mismas serían anunciadas este viernes.
¡Mirá vos! En Noruega el estado también financia a las empresas en riesgo. Subsidios, se les dice. Parecen argentinos…
Osvaldo así es, lástima que en todo lo demás no nos parecemos…
Virtualmente fundida
Si algo le faltaba a esta empresa para estar en la lona, es la pandemia xD!