BALPA, el sindicato que agrupa a los pilotos de British Airways, ha informado a IAG (International Airlines Group), holding madre de la aerolínea, que tiene la intención de celebrar una votación consultiva con sus miembros en relación a un acuerdo sobre las propuestas de reestructuración entre el sindicato y la aerolínea, en respuesta a la crisis de COVID que afecta a la industria de la aviación.
El sindicato ha recomendado a sus 4.500 miembros que trabajan en British Airways que aprueben la propuesta, cuya votación será el próximo 31 de julio.
El paquete presentado por la aerolínea incluye aspectos como trabajo part-time, relocalizaciones; una reducción inicial del 20% en los salarios que se ajustaría al 8% durante los próximos dos años; creación de una reserva de 300 pilotos que se mantienen empleados con un salario reducido y listos para volar a medida que la demanda se reactive; y el compromiso de que no se llevará adelante la política “fire and rehire”, consistente en despedir a pilotos para luego recontratarlos en peores condiciones.
Esto no evitaría el despido de alrededor de 270 pilotos, aunque es una cifra significativamente menor a los 1.255 que la aerolínea planeaba despedir.
“Es muy decepcionante que durante nuestras largas negociaciones British Airways no aceptara el paquete completo de mitigación que habíamos planteado, el cual no representaba ningún costo para la empresa y hubiese evitado despidos”, aseguró Brian Strutton, secretario General de BALPA. “Como resultado habrá algunos despidos entre la comunidad de pilotos, lo cual nos produce un gran lamento. Dada la intransigencia de British Airways hemos armado el mejor paquete posible para salvar la mayor cantidad de puestos de trabajo”, concluyó.
