Air New Zealand anunció esta semana cuatro nuevos acuerdos de asociación a largo plazo con las empresas ATR, Embraer, Heart Aerospace y Universal Hydrogen. Su objetivo es avanzar en la implementación de soluciones de bajas emisiones para sus operaciones regionales.
Las asociaciones forman parte del programa Mission NextGen Aircraft, que la aerolínea lanzó en 2022. En diciembre pasado, Air New Zealand anunció asociaciones Eviation, VoltAero, Beta y Cranfield Aerospace. En ese momento, las partes comunicaron que avanzarían en el desarrollo de alternativas de cero emisiones, con el fin de concretar vuelos de demostración alimentados por tecnologías eléctricas, de hidrógeno verde e híbridas a partir de 2026.
A partir de los nuevos acuerdos, la aerolínea neozelandesa avanzará en el proceso de sustitución de sus DHC Dash 8-300 por opciones más eficientes en términos de consumo de combustible y emisión de gases de efecto invernadero durante esta década y, especialmente, desde 2030.
Profundización de la relación con ATR
Air New Zealand fortalecerá su relación con ATR, mayor fabricante de aeronaves regionales del mundo. Según informó la compañía franco-italiana en un comunicado de prensa, ambas trabajarán en la exploración de «innovaciones disruptivas, cuyo resultado será decisivo para dar forma al futuro de la aviación regional».
«A través de nuestras asociaciones con Airbus y ATR, hemos podido profundizar nuestra comprensión del impacto que los aviones híbridos de baterías e hidrógeno verde pueden tener en nuestra red, operaciones e infraestructura, así como las oportunidades y desafíos de operar estos equipos de bajas o cero emisiones en Nueva Zelanda», comentó Kiri Hannifin, director de Sostenibilidad de la aerolínea.
«Con Mission NextGen Aircraft estaremos apoyando a Air New Zealand en cada paso de esta desafiante aventura de investigación de innovaciones disruptivas para convertir nuestros compromisos en una realidad tangible», aseguró Nathalie Tarnaud Laude, directora general de ATR.
Air New Zealand se une al grupo asesor Energía de Embraer
A partir de la concreción de un acuerdo, Air New Zealand se unirá al grupo asesor Energía (Energia Advisory Group) de Embraer. De esta forma, se sumará a un conjunto de aerolíneas, arrendadores, fabricantes y otros actores de la industria que actualmente asesoran al fabricante brasileño en materia de desarrollo de alternativas sostenibles.
El proyecto tiene como objetivo explorar conceptos alternativos de aeronaves sostenibles de hasta cincuenta asientos. Para ello, contempla diferentes fuentes de energía, equipos de propulsión y arquitecturas de fuselaje.
Embraer también trabajará junto con la aerolínea neozelandesa en su programa Mission Next Gen Aircraft para acelerar la introducción aviones regionales de bajas emisiones en el mercado del país oceánico.
«Los aviones regionales más pequeños van a ser las primeras plataformas en las que se podrán introducir nuevos sistemas de combustible y propulsión de manera efectiva», sostuvo Arjan Meijer, presidente y director general de Embraer Commercial Aviation. «Como líder mundial en aviones regionales, Embraer está en una posición ideal para llevar tecnologías disruptivas a este segmento primero», agregó.
Heart Aerospace, otro socio a largo plazo
La empresa sueca de desarrollo de aeronaves eléctricas Heart Aerospace también se convertirá en socio a largo plazo de Air New Zealand.
Actualmente, la compañía trabaja en su modelo ES-30, un avión eléctrico regional con capacidad para hasta treinta pasajeros impulsado por motores alimentados por energía eléctrica derivada de baterías. El desarrollador prevé entregar la primera unidad en 2028.
«Creemos firmemente que el enfoque de colaboración es la única forma de garantizar un futuro sostenible para la aviación», afirmó Simon Newitt, director comercial de Heart Aerospace. «Juntos podremos llevar un producto asequible, accesible y responsable a los usuarios de Nueva Zelanda», remarcó.
Acuerdo con Universal Hydrogen
Finalmente, Air New Zealand también concretó un acuerdo de asociación con Universal Hydrogen, una compañía que actualmente trabaja en soluciones de conversión de aviones regionales existentes para incorporar mecanismos de propulsión a partir de hidrógeno. La empresa creó un sistema de abastecimiento de combustible modular, que elimina la necesidad de crear nuevas infraestructuras aeroportuarias.
Una vez que se completen las pruebas de rigor y se obtenga la certificación correspondiente, los equipos de conversión podrían instalarse en parte de la flota regional de Air New Zealand.
«Estamos encantados de haber sido seleccionados, junto con otros socios a largo plazo, por Air New Zealand para abordar rápidamente las contribuciones de la aviación a la crisis climática», dijo Paul Eremenko, cofundador y director general de Universal Hydrogen.