La concesionaria Nuevo Pudahuel ha dado puntapié inicial a la inversión de cerca de 60 millones de dólares para remodelar y ampliar la terminal nacional del aeropuerto de Santiago de Chile.
Luego de la inauguración de la nueva terminal internacional en febrero de 2022, el antiguo edificio es utilizado para las operaciones domésticas. El proyecto impulsado por el gobierno de Chile y el concesionario Nuevo Pudahuel prevé una ampliación de 131.776 m².
En una primera fase que se ejecutará este año, se transformará la antigua área internacional para vuelos domésticos (ala oeste), que comenzará a operar en 2024. En 2024 y 2025 se mejorará el ala este, y en 2025 finalizará el nuevo edificio T1-A y la pasarela de conexión directa de la T1 a la T2-D. Este nuevo edificio sumará 17.000 metros cuadrados de áreas comerciales, de servicios y ocho nuevas puertas de embarque.
El número de puertas se elevará a 42, veinte más que en la actualidad.
La ministra Jésica López declaró: «hoy, con el inicio de obras, buscamos consolidar una Terminal Nacional mucho más grande, con más metros y mejores servicios para las personas, vamos a poder seguir por esta senda de la integración de Chile al mundo, como lo fue con la nueva Terminal Internacional, que inició sus operaciones hace un año y alcanzó estándares altísimos, y hoy comenzamos las obras para tener una Terminal Nacional digna para la cantidad de millones de viajes que se están haciendo a lo largo del país”.
«Necesitamos reforzar nuestra red de aeropuertos que nos permita mayor integración y circulación de las personas por el territorio. El MOP está dedicado a fortalecer y desarrollar la infraestructura del país, y lo hacemos mirando al futuro, mirando al Chile del 2050 o más. Y eso pasa por desarrollar muchas obras que nos permitan incluir a los territorios, e integrar habitantes,” completó López.
El edificio contará con nuevos locales comerciales y de servicios, una modernizada zona de check-in y nuevas pantallas de vuelo. Se inaugurará una nueva área de partidas y su puesto de control de seguridad. También se agregarán oficinas y salas de control para la Dirección General de Aviación Civil (DGAC).
“Cerca del 60% de nuestros pasajeros vuelan por el Aeropuerto de Santiago en vuelos nacionales. Este proyecto brinda tecnologías de alto estándar, mayor comodidad y servicios para los viajeros en Chile. Nuestro objetivo es mejorar la experiencia de los pasajeros nacionales y, al mismo tiempo, ofrecemos esta terminal como una infraestructura de alto estándar para ayudar a promover el turismo, conectividad, inversión y otros beneficios para Chile,” dijo François-Regis Le Miere, CEO de Nuevo Pudahuel, concesionaria del aeropuerto.
La Terminal 1A rendirá tributo a la zona de la costa central de Chile, siguiendo con el lineamiento de la Terminal Internacional (T2), cuyas puertas de embarque rinden tributo a otras zonas del país.
La obra tiene un plazo estimado de 20 meses, luego se contemplan tres meses para el proceso de recepción. Se espera que la terminal se inaugure para finales de 2025.