La Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) ha lanzado un nuevo programa para investigar el impacto del cambio climático en la aviación, con el fin de adaptar las prácticas de la industria y las autoridades reguladoras para asegurar la seguridad continua.
Esta iniciativa se produce en medio de hallazgos científicos que vinculan el cambio climático con un aumento en eventos meteorológicos severos y peligros naturales que presentan riesgos significativos para la seguridad de la aviación.
Durante la reunión inaugural de la Red Europea del Impacto del Cambio Climático en la Aviación (EN-ICCA) en la sede de EASA en Colonia, se centraron las discusiones en las diversas formas en las que el cambio climático podría afectar las operaciones de vuelo. Luc Tytgat, Director Ejecutivo de EASA, fue citado en relación con la urgencia de la situación, señalando un aumento en las interrupciones de las operaciones de vuelo debido al cambio climático y subrayando la importancia de la nueva red para abordar estos problemas.
De acuerdo a investigaciones citadas por EASA, el cambio climático podría incrementar la frecuencia y severidad de la turbulencia de aire claro en algunas regiones en donde el tráfico aéreo es denso como el Atlántico norte, el sudeste asiático y el Pacífico norte. Así también se predice que aumente la posibilidad de granizo de gran tamaño.
El lanzamiento de EN-ICCA se alinea con la adición del manejo del impacto climático a los objetivos estratégicos de EASA dentro del Plan Europeo de Seguridad Aérea. La agencia, a través de EN-ICCA, tiene como objetivo cerrar las brechas de conocimiento revisando la investigación científica existente sobre tendencias de peligros meteorológicos y la eficacia de las medidas actuales de adaptación al cambio climático en la aviación.
La red busca fomentar la colaboración entre los interesados en la aviación y coordinar los esfuerzos de investigación, con el objetivo final de proporcionar evaluaciones y recomendaciones para mantener altos estándares de seguridad ante los desafíos relacionados con el clima. Se ha programado una reunión de seguimiento para el 2024 para evaluar el progreso y actualizar las estrategias.
Gestionando el impacto del cambio climático en la aviación
El Plan Europeo de Seguridad Aérea ha incorporado un nuevo objetivo estratégico de seguridad para adaptarse y gestionar los patrones cambiantes de fenómenos meteorológicos peligrosos resultantes del cambio climático.
Esto refleja una estrategia más amplia a nivel global y de la UE para dar prioridad a la adaptación al clima. A nivel internacional, se está desarrollando una guía tras un trabajo fundacional significativo por parte de la OACI y la Organización Meteorológica Mundial.
Dentro de Europa, la estrategia de adaptación de la UE y la ley climática exigen un progreso continuo en la adaptación a los efectos del clima. La EASA ha llevado a cabo estudios preliminares sobre el transporte aéreo comercial y los aeropuertos, revelando una amplificación de ciertos riesgos de seguridad debido al cambio climático.
En consecuencia, se hace énfasis en la investigación y la recolección de datos para mejorar la gestión de riesgos y la planificación de la seguridad, asegurando la resiliencia de la aviación frente a los desafíos relacionados con el clima. Se solicita una mayor inversión en el estudio de fenómenos atmosféricos relacionados con la seguridad aérea.