Los problemas crónicos de falta de divisas y las trabas gubernamentales para afrontar los mismos nuevamente imponen un desafío al mercado aerocomercial argentino, y en especial a Flybondi, la segunda aerolínea más grande del país, con un 20% del market share. A mediados del año pasado también sufrió una situación similar cuando se acumularon deudas cercanas a los USD 15 millones.
Desde la ultra low-cost informaron este viernes que «debido a las demoras sistemáticas en la aprobación del pago de servicios al exterior por las restricciones pasadas y actuales se está viendo comprometida la capacidad de las aerolíneas para cumplir con los compromisos asumidos con sus pasajeros y proveedores«.
También señalaron que los nuevos instrumentos creados por el gobierno de Javier Milei no cumplen las expectativas de los proveedores (en referencia al BOPREAL, el bono creado para que los importadores de bienes y servicios salden sus deudas en el extranjero, que durante el último tramo del gobierno de Alberto Fernandez llegaron a los USD 60 mil millones).
Esta situación generó que los lessors requieran a Flybondi la paralización de parte de su flota, lo cual ocurre en el pico de la temporada alta de verano produciendo cancelaciones y reprogramaciones que, según la compañía, afectan a más de 1.300 pasajeros por día.
«Es importante recordar que más del 70% de los costos operativos de las aerolíneas están ligados al dólar, abarcando aspectos fundamentales como los contratos de leasing de aeronaves, servicios de repuestos y sistemas de aeronavegabilidad, entre otros«, indicaron desde Flybondi, destacando que mantienen contacto con las autoridades, a las que manifestaron «su preocupación ante esta situación advirtiendo la necesaria regularización, buscando que no se replique con otros proveedores que son esenciales para la operación aérea y que se encuentran en una situación similar por la falta de pago«.
«Flybondi reitera la importancia de considerar que la industria aerocomercial se rige con estándares internacionales de contratación a proveedores lo que exige un sistema con mayor agilidad para que no impacten en la conectividad de las provincias, en la economía argentina y en los pasajeros, quienes son los principales damnificados«, concluye el comunicado.
En el mismo no se detalla la cantidad de aviones afectados al momento, pero un memorando interno al que tuvo acceso Aviacionline detalla el pedido específico de un lessor para dejar en tierra un avión «con carácter inmediato», además de la devolución del mismo «producto de la pérdida de confianza en el país». Se trata del Boeing 737-800 matrícula LV-KGN propiedad de Aviation Capital Group.
La situación de la flota se vuelve más compleja porque la compañía tiene además otras tres aeronaves en tareas de mantenimiento que tampoco pueden finalizarse debido a no poder realizar los pagos a proveedores (uno se encuentra en proceso de C Check en Costa Rica), más otra aeronave fuera de servicio tras el tail strike sufrido en Mar del Plata la semana pasada. Esto deja a solo 10 de sus 15 aviones operativos, proporción importante pero que, como habían realizado una programación más conservadora para el verano, no revestiría tanta gravedad salvo que ocurran contingencias diarias.
Si bien el problema de la falta de divisas aqueja a toda la industria, Flybondi corre con desventajas frente a Aerolíneas Argentinas y JetSMART. Por un lado, la compañía estatal tiene algo de margen para afrontar pagos por las ventas que genera su red internacional, mientras que JetSMART también puede hacerlo via su casa matriz en Chile. Flybondi en cambio se apoya casi totalmente en su operación doméstica y su casa matriz está en Argentina (aún cuando posee inversores extranjeros).
Lo paradójico es que esto ocurre cuando al mismo tiempo la gestión de Javier Milei ha propuesto una desregulación del transporte aerocomercial para dinamizar aún más el mercado argentino.
Aunque fuentes de la industria reconocen que hay un cuello de botella muy importante heredado del gobierno anterior, necesitan que se tenga una mirada especial sobre la aviación comercial dadas sus particularidades.
NO HAY PLATA Y NO HAY EXCEPCIONES
Rezaría el título de un artículo detractor de tanto llanto corporativo. En Argentina utilizamos un término lapidario «pedorro» que remite a la precariedad y la improvisación. Seguramente si escarbamos la relación de Fly Bondi con el gobierno anterior descubriremos un besamanos y una contradanza de intereses mutuos. Ahora que necesitamos acallar el coro de insatisfechos por falta de prebendas, aparece Fly Bondi de cuerpo gentil clamando por sus dólares, que son más necesarios en otras situaciones. El mensaje fue claro, si no hay eficiencia pero si coimas «A F U E R A!!!». De nuevo: El privado debe asumir responsabilidades y disponer de suficiente capital para estos eventos, la alcancía y el chanchito mejor dejarlos en casa. QUE PASE EL QUE SIGUE!!!…
Payaso KK!
Quiza FB disponga del dinero, pero es solo a través del BC que se hacen los pagos al exterior, y es ahí donde no están los verdes. No confundir ehhh!
Los dólares los puede conseguir en el mercado a través de dolar MEP por ejemplo. Lo mas lamentable es que ya hay cancelaciones y demoras en varios vuelos.
Más allá de que este «drama» lo vivió repetidas veces durante el Gobierno anterior, este nuevo Gobierno está haciendo un desastre calamitoso en el manejo (o desmanejo) de la economía interna.
«No hay plata», pero tampoco hay cerebros capaces de diseñar caminos mejores a los engaños y desmanes que hemos venido transitando tras 20 años de Kirchnerismo y Macrismo (no olvidemos que ambos son responsables directos del espanto económico que es hoy la Argentina).
SR FERNANDO una cosa es comprar USD y otra cosa es PODER TRANSFERIR USD al exterior aun teniendo los USD. Hace 30 años que trabajo en turismo y hoy estamos más complicados que antes del 10/12
Señor Rolando: hasta donde se se puede transferir pero la falla evidente es que el Central siga vendiendo dólares porque no puede vender lo que no tiene. La compra de dólares debería ser a través del Mercado como cualquier otro bien que se compra. De esa manera se le da gran fluidez al mercado cambiario
Con el CCL puede sacar los dolares al exterior y pagar. A llorar a la Iglesia
No se puede vivir así, nada en argentina ofrece seguridad, hasta cuando viviremos con el corazôn en la boca? El Sr. Kputo actua como oposición.
Buenos días :
Se escribe «cuota de mercado», y no «market no sé qué «.
Usar términos en inglés cuando hay perfecta traducción en castellano o español, es incorrecto. Y de incultos.
Saludos,