La Armada Norteamericana adjudicó a Boeing un contrato por valor de 1.300 millones de dólares para la compra de los últimos 17 F/A-18 Super Hornets que va a adquirir, junto a un paquete de datos técnicos para el mantenimiento de la plataforma. Si no entran nuevos pedidos de clientes extranjeros, los últimos Super Hornet saldrán de la línea de producción en el 2027.
El 19 de marzo, el Pentágono anunció la compra de 10 aviones F/A-18F del Lote 46, así como dos F/A-18F y cinco F/A-18E del Lote 47. La entrega estos Super Hornets está prevista para comenzar durante el invierno de 2026, y la entrega final a no más tardar de la primavera de 2027.
Este último contrato viene siendo negociado desde hace años por la US. Navy, debido al aumento del costo de compra unitario del caza de Boeing, que en el año fiscal 2023 era de casi 60 millones de dólares, pero que fue aumentando de precio hasta acercarse al precio de los últimos lotes del F-35C Lightining II. De hecho, con el presupuesto disponible, solo se pudieron adquirir 17 cazas Super Hornet, de los 20 pretendidos originalmente.
«Estamos preparados para construir y entregar estos últimos F/A-18 Super Hornets del Bloque III a la US Navy en los próximos años», dijo Boeing en un comunicado.
Estirando el final por dos años
En febrero del año pasado, The Boeing Company había anunciado que la producción de nuevos cazas F/A-18 Super Hornet se completaría a finales de 2025, tras la entrega de los últimos cazas de la Marina estadounidense. Existía la esperanza de que la Armada India se convirtiera en un nuevo cliente internacional del modelo, ya que estaba en la búsqueda de un caza embarcado occidental para desplegar a bordo de sus portaaviones. Finalmente el Dassault Rafale fue el ganador del concurso, diluyéndose así la última esperanza de encontrar un nuevo cliente de exportación del caza de Boeing.
Finalmente, la nueva orden permitirá mantener las líneas de montaje del F/A-18E/F andando hasta el 2027, momento en el que probablemente dejará de fabricarse este emblemático caza embarcado, que entró en servicio operativo en el Cuerpo de Marines en 1983 y en la Marina de los EE.UU. en 1984.
Pese a todo, con unos 420 F/A-18E/F, más un pequeña flota de aviones de guerra electrónica EA-18G, el Super Hornet permanecerá siendo el «caballo de batalla» por excelencia, y tras la modernización de las unidades al Block III (que permitirá extender la vida operativa de las célucas de las actuales 6.000 a 10.000 horas de vuelo), seguirán manteniéndose como el avión de combate mas numeroso a bordo de los portaaviones de la US. Navy por décadas.