Con una extensión de aproximadamente 690 hectáreas, el Aeropuerto El Dorado de Bogotá se destaca como una de las terminales aéreas más grandes del mundo. Sin embargo, su verdadero impacto trasciende su tamaño, destacándose como uno de los líderes mundiales en sostenibilidad ambiental.
No solo es reconocido por su magnitud, sino también por su compromiso con el medio ambiente, siendo el primero en obtener la prestigiosa Certificación LEED ZERO Energy otorgada por el Consejo de Construcción Sostenible de Estados Unidos.
Manejo Integral de Residuos
La Estación de Clasificación y Aprovechamiento de Residuos (ECA) del aeropuerto, administrada por la empresa INTERASEO, es un ejemplo de eficiencia en la gestión de desechos. Con un enfoque basado en la matriz EPS (Entrada, Proceso, Salida), la ECA trabaja incansablemente las 24 horas del día, en tres turnos de operación, procesando alrededor de 3 toneladas de residuos diarios.
Gracias a este sistema, se logra aprovechar aproximadamente el 80% de los residuos generados, marcando así un hito en la economía circular y la reducción de la huella ambiental del aeropuerto.
Compromiso con el Agua y la Energía
El Dorado implementa estrategias vanguardistas para el cuidado del agua, tratando más de 1 millón de metros cúbicos anuales y devolviendo agua de calidad al río Bogotá por medio de su planta de tratamiento la cual funciona desde al año 2016. 
Además, su inversión en energía renovable, con la instalación de 10.368 paneles solares y la adopción de tecnología LED en 25.000 luminarias, ha permitido reducir más de 1.375 toneladas de dióxido de carbono al año, demostrando su compromiso con la reducción de emisiones y la eficiencia energética.
