El Ministerio de Puertos y Aeropuertos calificó como fundamental la transferencia de casi R$ 426 millones (~USD 77 millones) por parte del gobierno federal a la empresa Fraport, concesionaria del Aeropuerto Internacional Salgado Filho, en Porto Alegre (RS).
“La medida cautelar tiene una importancia fundamental para garantizar la continuidad de las operaciones aeroportuarias en el principal punto de conexión de Río Grande del Sur, asegurando la integración aérea para la población”, dijo la entidad en un comunicado, afirmando que aún está evaluando el pago.
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El pasado viernes (23), la Agencia Nacional de Aviación Civil (ANAC) autorizó la transferencia de R$ 425,96 millones a la concesionaria, según reporta nuestro medio asociado en Brasil, Aeroin. Sin embargo, la efectivización del pago depende del aval del ministerio. Si el ministerio aprueba la transferencia, Fraport deberá usar todo el dinero para reconstruir el complejo aeroportuario, severamente dañado por las consecuencias de las tormentas que afectaron a casi todo el territorio del estado de Río Grande do Sul entre finales de abril y mayo de este año.
De los R$ 425,96 millones, R$ 362,22 millones deben ser asignados al inicio de las obras de reconstrucción del aeropuerto, y alrededor de R$ 63,94 millones deben destinarse al mantenimiento de las actividades aeroportuarias mientras los trabajos no se completen.
De acuerdo con el Ministerio de Puertos y Aeropuertos, si se aprueban, los “créditos extraordinarios” se establecerán mediante una Medida Provisional (MP) y se transferirán a Fraport de manera parcelada “a medida que se compruebe la necesidad de los gastos para la reconstrucción del aeropuerto”, destacando que los valores podrán ajustarse durante el procedimiento regular de revisión del contrato de concesión.
Aeropuerto cerrado
Responsable de más del 90% del tráfico aéreo en Río Grande do Sul, el Aeropuerto Salgado Filho permaneció completamente cerrado entre el 3 de mayo, cuando las aguas inundaron las pistas de aterrizaje y despegue y la terminal de pasajeros, hasta mediados de julio, cuando se reanudaron los embarques y desembarques de pasajeros. Aún hoy, los pasajeros continúan siendo transportados a la Base Aérea de Canoas, a unos diez kilómetros de distancia, donde los aviones siguen aterrizando y despegando.
Según Fraport, las obras de “rehabilitación” del aeropuerto están avanzando conforme al cronograma pactado con el gobierno federal. Parte del fresado y repavimentación de las pistas destruidas por las aguas ya se ha completado e incluso se está construyendo una planta de asfalto dentro del aeródromo para agilizar los trabajos.
A pesar de esto, la concesionaria solicitó al gobierno federal la revisión extraordinaria del contrato de concesión de infraestructura aeroportuaria, alegando que, con la interrupción de las actividades y la necesidad de reparar los daños causados por las inundaciones, sufrió un impacto financiero significativo. Se estima que solo la reconstrucción de Salgado Filho requerirá alrededor de R$ 1 mil millones (~ USD 181 millones).
Reunión de la ANAC
Durante la reunión extraordinaria que la directiva de la Agencia Nacional de Aviación CIvil celebró el pasado viernes para analizar la solicitud de Fraport, el director-presidente interino de la agencia, Tiago Sousa Pereira, afirmó que la propuesta contó con el aval de los técnicos de la Superintendencia de Regulación Económica de Aeropuertos, de la propia ANAC , y de la Abogacía General de la Unión (AGU), que reconoció la legalidad de la revisión extraordinaria del contrato de concesión.
“Sobre el modo de recomposición, (la empresa) entiende que la mejor forma es el pago en efectivo, a modo de indemnización, para no incurrir en el riesgo inminente de iliquidez de caja y posibilitar el intento de retomar la operación aeroportuaria lo antes posible. La concesionaria también solicita que se cubran costos extraordinarios aún no conocidos”, aclaró Pereira.