La Asociación Chilena de Líneas Aéreas (Achila) ha elevado un contundente llamado de atención frente a la creciente congestión y largas esperas que afectan a miles de pasajeros en el Aeropuerto Comodoro Arturo Merino Benítez de Santiago. Según la entidad, la situación, calificada como una «crisis», refleja la falta de medidas efectivas para enfrentar la alta demanda de la temporada.
Carolina Simonetti, gerenta general de Achila, subrayó que las filas en los controles migratorios, tanto de entrada como de salida, son un problema recurrente que afecta no solo a los pasajeros, sino también a la imagen del país como destino turístico y centro de conexiones aéreas. «Es necesario que las autoridades asuman un rol activo y coordinen soluciones inmediatas y de largo plazo«, afirmó.
Aunque la Policía de Investigaciones (PDI) instaló tótems de autoatención como medida para agilizar los trámites migratorios, Achila sostiene que su impacto ha sido limitado. Estos dispositivos, que solo pueden ser utilizados por ciudadanos chilenos mayores de edad, dejan fuera a una gran parte de los viajeros internacionales, perpetuando las demoras y la saturación en los controles.
La situación no es nueva. Desde noviembre, Achila y otros actores del sector han manifestado su preocupación ante la Dirección General de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas y otros organismos pertinentes como la Contraloría General de la República. Sin embargo, la asociación asegura que las respuestas han sido insuficientes y carecen de un impacto real en la experiencia de los pasajeros.
Achila enfatiza que los problemas operativos del aeropuerto afectan la competitividad de Chile en la región y urgen a una acción conjunta entre las autoridades y la concesionaria para mejorar la infraestructura y los procesos. «Es inaceptable que un aeropuerto de esta envergadura no cuente con una gestión acorde a la demanda actual», concluyó Simonetti.
Mientras tanto, miles de pasajeros continúan enfrentando largas esperas en plena temporada alta, dejando en evidencia la necesidad de soluciones inmediatas para superar una crisis que afecta la confianza en el principal terminal aéreo del país.