La aeronave de despegue y aterrizaje de alta velocidad SB-1 Defiant, de Lockheed Martin Sikorsky-Boeing completó con éxito los vuelos de prueba del perfil de la misión del programa FLRAA, incluyendo aterrizajes en áreas confinadas y operaciones de vuelo a bajo nivel.
Estos vuelos validan la relevancia del DEFIANT para la misión del US Army, proporcionando agilidad sobre el área del objetivo (también conocido como la «X»), y una mayor capacidad de supervivencia, todo ello reduciendo la carga de trabajo del piloto.
«Demostramos plenamente la capacidad de DEFIANT para ejecutar el perfil de la misión FLRAA volando a 236 nudos en vuelo nivelado, y reduciendo después el empuje del propulsor para desacelerar rápidamente al acercarnos a la zona de aterrizaje confinada y no mejorada», dijo Bill Fell, piloto jefe de pruebas de vuelo de DEFIANT en Sikorsky y maestro aviador retirado del Ejército de los Estados Unidos. «Este tipo de desaceleración en vuelo nivelado nos permitió mantener el conocimiento de la situación y ver la zona de aterrizaje durante toda la aproximación y el aterrizaje sin la típica desaceleración del helicóptero con el morro hacia arriba. Esta área confinada era extremadamente estrecha, lo que nos obligó a retrasar el descenso hasta casi el lugar de aterrizaje, seguido de un descenso casi vertical. Aterrizamos el DEFIANT precisamente en el objetivo con poco esfuerzo al descender en este estrecho agujero mientras manteníamos el espacio libre en todos los lados».
El SB11 DEFIANT es el demostrador tecnológico que prueba las capacidades transformadoras del sistema de armas DEFIANT X, la oferta del equipo Sikorsky-Boeing para el concurso Future Long-Range Assault Aircraft (FLRAA) del Ejército de Estados Unidos como parte del programa Future Vertical Lift (Futuro sistema de Elevación Vertical) del US. Army.
El DEFIANT X permitirá a las tripulaciones volar bajo y rápido a través de terrenos complejos, donde los aviadores del Ejército pasan la mayor parte de su tiempo. Ampliará las capacidades de la aviación del Ejército en el campo de batalla moderno, y está diseñado para ocupar el mismo espacio que un BLACK HAWK. Con el DEFIANT X, el Ejército de los Estados Unidos entregará tropas y carga en el combate futuro con el doble de alcance que la flota actual de helicópteros convencionales.
«Es lo que llamamos “construir rápidamente el poder de combate”, y aviones como el DEFIANT X pueden hacerlo», dijo Tony Crutchfield, teniente general retirado del Ejército de Estados Unidos y ahora vicepresidente de Sistemas del Ejército en Boeing. «En el Pacífico, es aún más importante porque las líneas de operación van a estar dispersas en una amplia zona; vas a tener estas pequeñas bases y líneas de suministro que estarán situadas en barcos o en islas. Vas a querer mover más activos, maniobrar en terrenos confinados y sobrevivir para construir ese poder de combate más rápido que tu adversario, para poder ganar».
El DEFIANT X incorpora la tecnología X2™ de Sikorsky para operar a altas velocidades manteniendo las cualidades de manejo a baja velocidad. Esta capacidad crítica proporciona a los pilotos una mayor maniobrabilidad y capacidad de supervivencia en entornos de alta amenaza, lo que les permite penetrar en las defensas enemigas mientras se reduce la exposición al fuego enemigo. El sistema de rotor coaxial X2 y la hélice de empuje del DEFIANT X permiten un alto grado de maniobrabilidad dentro y alrededor del objetivo (la “X”), lo que también está directamente relacionado con la capacidad de supervivencia.
Los logros de DEFIANT incluyen:
- Giros de más de 60 grados
- Demostrar la capacidad de carga relevante para la misión levantando una carga externa de 5.300 libras (2.404 kg) del Sistema de Cohetes de Lanzamiento Múltiple Guiado (MRLS)
- Superación de 245 nudos de velocidad en vuelo nivelado (en pruebas llegó a 247 nudos, o 457 Km/h)
- Demostración de agilidad de nivel 1 a baja velocidad con controles de vuelo por cable (fly-by-wire)
- Integración de los pilotos de prueba del ejército estadounidense en el programa Defiant
- Basado en la tecnología X2, ganadora del premio Collier