Qatar Airways se negó a pagar a Airbus 220 millones de dólares en concepto de multa por no aceptar la entrega de dos unidades del A350. De acuerdo a la aerolínea, dicha deuda no existiría ya que no hubo ruptura del contrato por su parte.
La aerolínea con sede en el Golfo afirmó en documentos presentados ante el tribunal de Londres, a los que Bloomberg accedió, que no rompió su contrato con Airbus al negarse a aceptar dos aeronaves del tipo. Además, remarcó que el fabricante no habría explicado adecuadamente cómo había arribado a dicha cifra.
Recapitulando: Qatar Airways ha demandado al fabricante por más de 600 millones de dólares producto de los defectos de la pintura del A350. El lunes, en una nueva presentación ante el tribunal de la causa, la aerolínea indicó que los defectos de la superficie podrían tornar al avión vulnerable a los rayos.
Además, señaló que la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA), que ha respaldado la afirmación de Airbus de que no hay ningún problema de seguridad con el tipo, no ha realizado un «análisis exhaustivo» de la situación, dejando entrever su postura de que la decisión del regulador europeo podría ser motivada más por la política que por cuestiones técnicas.
Qatar Airways también enumeró otras compañías aéreas que han manifestado su preocupación por el A350. Entre ellas se encuentran Finnair y Cathay Pacific, que ya plantearon dudas sobre ciertos desprendimientos de material allá por 2016.
Las partes también discrepan sobre si Airbus ha indagado efectivamente en la causa del problema. El fabricante propuso «un parche» para un avión que, según Qatar, presentó fallas apenas una semana después de su reparación.