El 9 de mayo, Azul presentó su informe del primer trimestre de 2022, que mostró un aumento significativo de los ingresos en comparación con el primer trimestre de 2009. Esta comparación refleja el excelente desempeño de la empresa, ya que 2019 es el último año de crecimiento antes de que la pandemia afecte a la industria.
Si se compara con el 1T2021, la diferencia de ingresos es del 74,9% con un aumento del 26,4% en la capacidad. El primer trimestre de 2022 es el segundo consecutivo con ingresos por encima de los niveles de la pandemia: un resultado impresionante, ya que Omicron golpeó la primera parte del período.
El EBITDA de Azul alcanzó 592,7 millones de reales (115 millones de dólares) en el trimestre, lo que representa un margen del 18,6%. Excluyendo el impacto de la variante Omicron, el EBITDA habría sido cercano a los 900 millones de reales, o 175 millones de dólares.
La empresa afirma que, considerando el actual escenario de demanda, combustible y tipo de cambio, espera generar un EBITDA récord de 4.000 millones de reales (780 millones de dólares) en 2022, incluso con el impacto de la variante Omicron en el primer trimestre.
Azul también proyecta un EBITDA de 5.500 millones de reales (1.070 millones de dólares) en 2023, en comparación con el anterior récord de EBITDA de 3.600 millones de reales (702 millones) en 2019.
La compañía dijo que se espera que la capacidad total crezca un 10% en 2022 en comparación con 2019, y con una recuperación significativa esperada en el segmento de viajeros de negocios, ya que ya está en el 71% de los niveles prepandémicos.
El mercado de carga ha alcanzado los 300 millones de reales (58 millones de dólares), un 37,8% más que en el 1T2021 y triplicando los resultados del 1T2019. Impulsadas por las condiciones de la pandemia, las operaciones de carga demostraron ser impresionantemente relevantes.
