Las multas impuestas por el gobierno de India a SpiceJet y Vistara fueron de un millón de rupias (alrededor de 12.900 dólares). En primer lugar, la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) sancionó a SpiceJet por entrenar a los pilotos de sus Boeing 737 MAX en un simulador defectuoso. Asimismo, misma suerte corrió Vistara por un aterrizaje realizado por un piloto no habilitado.
El regulador de la aviación hindú prohibió el mes pasado a 90 pilotos de SpiceJet operar el MAX después de descubrir que estaban siendo entrenados en un simulador que tenía el stick shaker del copiloto inoperativo. La respuesta enviada por la aerolínea no fue considerada satisfactoria por el regulador, por lo que se decidió llevar adelante la aplicación de la multa. Una fuente consultada por CNBC señaló que «la formación impartida por la aerolínea podría haber afectado la seguridad de los vuelos y fue desaprobada».
Vistara sufrió similar suerte
Misma multa que SpiceJet recibió Vistara luego de que la DGCA fuese anoticiada que un primer oficial aterrizó en Indore -una ciudad en el centro de la India- siendo supervisado por un capitán que no contaba con la habilitación para entrenar tripulaciones.
Un alto ejecutivo de la DGCA señaló a Times of India que «esta seria violación puso en peligro a todos» en el vuelo 913 del 9 de agosto de 2021, que voló entre Delhi e Indore. «Vistara fue multada porque el primer oficial que aterrizó el avión no completó su entrenamiento en simulador. Además, el capitán que lo supervisaba no estaba habilitado para entrenar tripulaciones», agregó el funcionario.
La aerolínea respondió indicando que «la tripulación estaba habilitada para vuelos supervisados por su antiguo empleador. Cuando pasaron a volar con Vistara dicha autorización continuó vigente. La seguridad es nuestra prioridad, y por ello fuimos nosotros mismos lo que reportamos el incidente a las autoridades».
