Emirates anunció una drástica medida en sus operaciones a Nigeria por no haber resuelto un problema con las autoridades del país.
La empresa informó a sus clientes que ha intentado por todos los medios hacer frente a los problemas actuales de repatriación de fondos desde Nigeria, y ha realizado esfuerzos considerables para iniciar el diálogo con las autoridades pertinentes para encontrar una solución viable, pero lamentablemente no se ha logrado ningún progreso, según reporta nuestro medio asociado, Aeroin.
Con esto, Emirates ha tomado la difícil decisión de suspender todos los vuelos hacia y desde Nigeria, a partir del 1 de septiembre de 2022, para limitar más pérdidas y el impacto en sus costes operativos que siguen acumulándose en el mercado.
Actualmente Emirates opera desde Dubai cinco vuelos semanales hacia Abuja y once vuelos semanales a Lagos, en ambos casos con aeronaves Boeing 777-300ER.
Cuando una aerolínea vende billetes para un vuelo a un país concreto a través de sus propios sistemas, el dinero que pagan los clientes se queda directamente en la compañía. Sin embargo, algunos fondos procedentes de las ventas realizadas, por ejemplo, por los agentes en el país de destino, así como ciertas cantidades que se van a recibir de las operaciones en el país, pueden ser bloqueados por el gobierno local con el argumento de que se liberarán cuando las condiciones económicas del país mejoren.
Así, en una situación como ésta, bastante común en algunos países africanos y latinoamericanos, por ejemplo, no se puede prever cuándo llegará efectivamente a su caja el dinero que pertenece a la compañía aérea.
En Latinoamérica, Venezuela fue un caso paradigmático cuando durante la década pasada retuvo fondos que rondaron los USD 3.800 millones a las aerolíneas internacionales.