La semana pasada la industria fue sorprendida al conocerse que a partir del 1 de marzo de 2023 el gobierno israelí prohibirá la operación de aeronaves cuatrimotores en el aeropuerto de Tel Aviv bajo la justificación de mitigar la contaminación sonora.
Esto pondría fin a la presencia de aeronaves icónicas como el 747, el A380 o el A340, que si bien actualmente no realizan vuelos regulares de pasajeros a Israel, sí pueden hacerlo, principalmente en el caso del Jumbo, como cargueros.
Consultado por medios de prensa sobre este tema en el marco de una teleconferencia realizada esta mañana de la cual participó Aviacionline, Willie Walsh, Director General de IATA, dijo que se sorprendió mucho por la medida, la cual será muy disruptiva, particularmente para la industria de la carga aérea. «Hay muchos 747 cargueros en el mercado, y muchos de ellos sirven a Israel».
De todas maneras, el ejecutivo se mostró tranquilo y dijo: «No creo que esto sea replicado por otros países, los cuales harán un análisis más detallado sobre las posibles disrupciones que sus mercados sufrirían».
«No entiendo por completo la lógica que se está utilizando para introducir esta prohibición, y creo que se va a traducir en algunos trastornos para el suministro de cargas en Israel, particularmente en un contexto en el que la demanda de carga continúa fuerte y la oferta en general sigue afectada por el impacto en el segmento de pasajeros», prosiguió Walsh.
Pero de todas maneras concluyó insistiendo en que no cree que esto produzca un efecto contagio y se replique en otros mercados.
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