El Aeropuerto Internacional «Cataratas del Iguazú» ubicado en Pto. Iguazú, provincia de Misiones, ha sido uno de los aeropuertos argentinos que ha experimentado algunas de las mayores cifras de crecimiento de tráfico durante los últimos 15 años, motorizado por el boom del turismo receptivo que se vivió tras la devaluación post-crisis 2001.
Como podemos ver en este gráfico, de apenas 227.192 pasajeros transitados aquel año se pasaron a 863.165 en 2015, cifra casi cuatro veces superior (como referencia, en todo el Sistema Nacional de Aeropuertos el tráfico se duplicó en el mismo período).
El movimiento de aeronaves, si bien también ha mostrado grandes cifras de crecimiento, no tuvo el mismo ritmo principalmente debido a que las compañías modificaron su oferta incorporando en la ruta aviones de mayor capacidad. La participación de las aeronaves de pasajeros sobre el total de aeronaves se mantuvo casi sin cambios, salvo algunos años específicos.
En este contexto de crecimiento, las instalaciones del aeropuerto Cataratas del Iguazú se habían visto superadas, principalmente en lo que respecta al control de tráfico aéreo, ya que la torre de control es previa a las últimas obras de ampliación y remodelación de la terminal que se llevaron a cabo a fines de los 90, las cuales sí han podido absorber la demanda generada durante los últimos 15 años, aún con ciertos inconvenientes.
Los controladores venían reclamando hace años la remodelación de la actual torre o bien la construcción de una nueva, ya que trabajaban en condiciones que no sólo ponían en riesgo la seguridad aérea sino la de ellos mismos.
Fue así que en abril de 2014 el ORSNA llamó a licitación para la construcción de la nueva torre de control, la cual fue adjudicada en noviembre del mismo año a la empresa Rovella Carranza S.A., que empezó a construirla en mayo de 2015, con una inversión prevista en $24.405.133.
La nueva torre de control tendrá una altura de 29,15 metros de altura distribuidos en 7 niveles además de la planta baja.
En el nivel superior se encontrará la cabina de control con espacio para cinco puestos, entre ellos el del supervisor y uno para balizamiento. En el nivel superior se encontrará la cabina con espacio para cinco puestos, entre ellos el del supervisor y un puesto para balizamiento. En el piso inmediatamente inferior, se ubicará la sala de descanso, con una sala de estar con sanitario unisex y un frente vidriado integral con excelentes visuales a la pista. En el siguiente nivel se encontrará la sala técnica, con oficinas adyacentes para jefe técnico y sala de UPS. Los tres niveles sucesivos serán destinados a distintos usos técnicos como apoyo a las instalaciones sanitarias y termomecánicas. Finalmente, en la Planta Baja se ubicará el jefe de torre, con oficina privada con vista a la pista, sanitario y office.
La obra se encuentra en un estado avanzado, ya que como podemos ver en este video que compartió ayer en sus redes sociales el Ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, toda la estructura está terminada y se está trabajando en terminaciones tanto del interior como del exterior.
Esto va a ser un merecido gran avance para el aeropuerto de Pto. Iguazú, el sexto de mayor movimiento de Argentina en 2015 y líder en la región del nordeste argentino. Actualmente operan en él Aerolíneas Argentinas/Austral y LATAM Argentina. La primera ofrece 45 vuelos semanales desde el Aeroparque Jorge Newbery, 7 desde el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, 5 desde Córdoba, 4 desde Salta (que luego siguen a Córdoba) y 3 desde Rosario (con destino final San Rafael, mientras el aeropuerto de Mendoza esté cerrado por obras).
