Spirit y sindicatos negocian nuevo contrato para finalizar la huelga que pone en jaque la producción del 737 MAX

Spirit Aerosystems y la filial 839 de la IAM (International Association of Machinists and Aerospace Workers) han esbozado una nueva propuesta de contrato para resolver la huelga que bloquea la producción en su planta de Wichita desde el viernes pasado.

Desde la empresa destacaron que entre los puntos más importantes del contrato se encuentran el mantenimiento del plan actual de salud sin ningún cambio, no establecer horas extras obligatorias los fines de semana, firmar por un bono en efectivo de 3.000 dólares, y un incremento en los salarios del 9,5% el primer año, un incremento garantizado del 23,5% en los cuatro años de duración del contrato, así como bonos anuales y correcciones por el incremento del costo de vida.

Esta nueva propuesta será sometida a votación entre los afiliados el próximo jueves 29.

«Hemos escuchado atentamente y trabajado duro en nuestras conversaciones durante los últimos días para comprender mejor y abordar las prioridades de nuestros empleados representados por la IAM», dijo Tom Gentile, Presidente y CEO de Spirit AeroSystems.

«Creemos que esta nueva oferta es justa y competitiva y reconoce las contribuciones de nuestros empleados cubiertos por esta propuesta de acuerdo, permitiendo nuestra capacidad para satisfacer las crecientes necesidades de nuestros clientes y ofrecer valor a nuestros inversores», agregó.

Las operaciones en la planta de Wichita de Spirit Aerosystems se encuentran paralizadas desde el jueves pasado, cuando la compañía se adelantó al llamado a la huelga votado por los trabajadores el día anterior al rechazar la propuesta de nuevo contrato.

En esa planta se producen los fuselajes de la familia 737 MAX de Boeing, así como distintos componentes esenciales de otras familias de aeronaves que representan hasta el 70% de las estructuras de aeronaves de fuselaje angosto, de negocios y defensa, poniendo presión extra a la ya extenuada cadena de suministros de la industria aeroespacial.

Ver también: Peligra la cadena de producción de Boeing ante la suspensión de operaciones de Spirit AeroSystems en Wichita

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