La demorada certificación del 737 MAX 10, la variante más grande de la última generación de aeronaves de pasillo único de Boeing, ha dado esta semana un paso clave luego de que la Federal Aviation Administration de Estados Unidos autorizara el inicio de los vuelos de prueba con sus inspectores.
De esta manera se empezará a reunir información sobre la performance de la aeronave en un proceso que, si marcha sobre ruedas, podría finalizar a finales de 2024 para así habilitar el ingreso al servicio comercial con las primeras aerolíneas durante 2025.
La información fue dada a conocer por Dominic Gates del Seattle Times citando una comunicación interna de Boeing en la que Mike Fleming, vicepresidente de Boeing a cargo del desarrollo de programas de aviones comerciales, detalla que, desde el primer vuelo de la aeronave en junio de 2021, los pilotos de prueba de Boeing ya han realizado más de 400 operaciones acumulando alrededor de 1.000 horas de vuelo en el MAX 10.
Normalmente solía trascurrir un año entre el primer vuelo de un avión y su certificación por parte de la FAA, pero luego de los accidentes del 737 MAX 8 de Lion Air y Ethiopian Airlines en 2018 y 2019 respectivamente, el congreso de Estados Unidos aprobó a finales de 2020 nuevas regulaciones que endurecieron los requerimientos de pruebas para permitir un mayor control de la FAA sobre asuntos que antes se delegaban en Boeing, en especial cuando se traten de nuevas tecnologías críticas.
La variante más chica, el 737 MAX 7, fue la primera en tener que atravesar este nuevo regimen, y si bien la campaña de vuelos de prueba de la FAA finalizó en 2021, el organismo todavía está analizando toda la documentación, esperando que el certificado se entregue a principios de 2024. Según Gates, todo el know-how que Boeing ganó con el 737 MAX 7 haría que el proceso final para el 737 MAX 10 sea más rápido.
Hasta mediados de este año Boeing nunca había revelado cómo se distribuían los pedidos de la familia 737 MAX entre las diferentes variantes. De las más de 4.000 aeronaves pendientes de entrega, el 19% pertenecían al 737 MAX 10, siendo la variante más popular detrás del 737 MAX 8 (63%), y seguida por el 737-8200 (versión de alta densidad del MAX 8, con 8%); el 737 MAX 7 (7%); y el 737 MAX 9 (3%).
La certificación del Boeing 737 MAX 10, depende más de las mentiras de Boeing sobre el 3er piloto abordo, con poder de decisión, que de una nueva tecnología no divulgada de dicha aeronave 737 MAX 10.