COMAC, el fabricante chino de aviones, ha rebautizado su jet regional ARJ21-700 como C909 en un esfuerzo por alinear su estrategia de nombres con sus modelos más grandes, el C919 y el C929, similar a la estrategia adoptada por gigantes de la industria como Boeing y Airbus. El cambio tiene como objetivo crear una familia de productos más cohesiva y fortalecer su atractivo en los mercados internacionales.
El rebautizo fue revelado por primera vez a través de una imagen compartida en Weibo, mostrando un avión de demostración con el nuevo nombre C909, acompañado de las palabras «COMAC EXPRESS» y un número de registro provisional B-099A. Este cambio de nombre alinea el C909 con la gama existente de COMAC, que incluye el C919, un avión de pasillo único con capacidad para aproximadamente 170 asientos, y el C929, un avión de fuselaje ancho actualmente en desarrollo.
El ARJ21, que fue lanzado originalmente en 2002 y entró en servicio oficialmente en 2016 después de una prolongada fase de desarrollo, ha demostrado su eficacia en el mercado doméstico. Ha sido particularmente exitoso en el servicio de aerolíneas chinas, con 150 unidades ya entregadas. Sin embargo, con este rebautizo, COMAC apunta a expandirse más allá de China y atraer a compradores internacionales.
Los desarrollos recientes en África y Asia Central muestran que COMAC ya está avanzando en los mercados globales. Por ejemplo, Equatorial Congo Airlines (ECAir) anunció la compra de tres aviones ARJ21 para operar rutas en la República del Congo, marcando la entrada del modelo en África. Esta decisión se da en un contexto de reanudación de operaciones por parte de ECAir, que había dejado de operar por casi una década, citando que el ARJ21 es adecuado para rutas regionales de baja demanda, donde aviones más grandes como el Boeing 737 resultan menos eficientes. La capacidad del ARJ21 de transportar hasta 90 pasajeros lo hace ideal para mercados más pequeños con factores de ocupación variables.
En Asia Central, el ARJ21 completó su primer vuelo regular internacional en junio de 2024, con Chengdu Airlines operando una ruta entre Khujand, Tayikistán y Kashgar, Xinjiang. Este vuelo inaugural es parte de un esfuerzo más amplio para establecer una «ruta aérea de la seda«, conectando a China con países vecinos y facilitando mayores intercambios económicos y culturales. Además, el avión ha sido utilizado en Xinjiang, con 43 rutas operando ahora en la región, lo que demuestra su versatilidad y fiabilidad en entornos operativos variados.
El ARJ21, clave para las capacidades de fabricación aeronáutica en China
El programa ARJ21 fue crucial para COMAC ya que permitió al fabricante consolidar sus capacidades de producción de aviones y adquirir conocimientos esenciales de la industria. Basado inicialmente en el McDonnell Douglas MD-80/90, el desarrollo del ARJ21 enseñó a COMAC lecciones valiosas sobre diseño moderno de aeronaves, procesos de fabricación y procedimientos de certificación. Superando varios obstáculos técnicos durante su desarrollo, que incluyeron pruebas extensas y modificaciones de diseño, el ARJ21 fue fundamental para que COMAC adquiriera la experiencia necesaria para desarrollar aviones más avanzados, como el C919.
El rebautizo del ARJ21 como C909 también señala la intención de COMAC de mejorar su visibilidad y competitividad en los mercados internacionales. Con próximas presentaciones en eventos globales como el Salón Aeronáutico de Zhuhai, es probable que COMAC aproveche la nueva identidad del C909 para atraer más interés, particularmente en regiones donde hay demanda de aviones regionales más pequeños y flexibles.
Además, la expansión del ARJ21 en el mercado de carga, con YTO Airlines operando cargueros convertidos, resalta aún más su adaptabilidad. Esta versión carguera, capaz de transportar 10 toneladas, podría ayudar a COMAC a ganar terreno en el creciente mercado de carga aérea de corta distancia, tanto en China como internacionalmente.
A medida que COMAC continúa expandiendo su línea de productos y presencia global, el rebautizo del ARJ21 como C909 representa un paso estratégico para consolidar su papel como competidor de Boeing y Airbus, no solo en China, sino en mercados emergentes de todo el mundo.
China le presta el dinero a Congo, para que compre aviones chinos.
Así, cualquiera.