El sector aéreo en Bolivia registró una disminución en 2024, con una caída estimada del 4,9 % en el tráfico total de pasajeros en comparación con 2023. Según el informe ALTA Aviation Insight Bolivia (disponible para descarga al final de la nota), el mercado doméstico ha sido el más afectado, con una contracción del 7,9 %, mientras que el segmento internacional mostró un crecimiento del 5,8 %. Se estima que el tráfico interno alcanzará los 5,1 millones de pasajeros, por debajo de los 5,5 millones del año anterior, lo que pone de manifiesto las dificultades en la recuperación del mercado interno.
«El informe subraya la necesidad de fortalecer el diálogo entre el gobierno y la industria aérea para enfrentar desafíos como los altos costos operativos, la conectividad limitada y la falta de incentivos para atraer nuevas aerolíneas», dijo José Ricardo Botelho, CEO de la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA).
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Mercado interno en retroceso y señales positivas en el segmento internacional
El mercado doméstico continúa bajo presión, con una menor demanda en rutas clave como La Paz-Santa Cruz de la Sierra.
Por otro lado, el segmento internacional muestra señales de recuperación, con un desempeño destacado en la ruta La Paz-São Paulo, que transportó 246.000 pasajeros en 2024, según el informe de ALTA. Santa Cruz – Madrid se encuentra en el segundo lugar con 201.000 pasajeros, y Santa Cruz – Buenos Aires en el tercero, con 181.000.
El 65,4% de los pasajeros internacionales en Bolivia tienen como origen o destino a Latinoamérica, seguido por Europa con el 16,5%, Norteamérica con 16,6%, Asia-Pacífico con 0,8%, y Oriente Medio y África con 0,2% cada uno.
A pesar de estos retos, la aviación sigue desempeñando un papel fundamental en la economía boliviana. El sector aportó un 5,7 % al PIB en 2019 y, aunque se espera una ligera disminución al 5,5 % en 2024, continúa siendo clave para el desarrollo económico. Además, el turismo internacional, estrechamente vinculado al transporte aéreo, ha crecido un 31 %, alcanzando los 2,2 millones de visitantes en 2023.
El factor de ocupación del mercado boliviano cerrará en 2024 con un promedio de 85%. En el mercado internacional será del 79% y en el de cabotaje, 88%.
Yanela Zárate Morón, CEO de la Asociación de Líneas Aéreas de Bolivia (ALA Bolivia), destacó la resiliencia de las aerolíneas, que mantienen sus operaciones a pesar de las dificultades económicas, como la escasez de dólares y los cambios unilaterales en las condiciones operativas. «La continuidad del servicio refleja el compromiso de los profesionales de la aviación, que garantizan una salida segura, puntual y eficiente para el turismo y el comercio exterior en un país mediterráneo como Bolivia», afirmó Zárate.
Según detalla ALA Bolivia, el sector genera aproximadamente 300 empleos directos, 600 indirectos y cerca de 2.000 puestos transversales vinculados al turismo.
Retos económicos y regulatorios
Entre los principales obstáculos que enfrenta la industria aérea boliviana destacan los altos costos del combustible, que se ubican en 3,75 dólares por galón, y la falta de acuerdos bilaterales adecuados. Botelho instó a las autoridades a tomar medidas inmediatas.
«La situación actual requiere acción urgente para resolver los problemas que frenan el potencial de la industria. Instamos al gobierno de Bolivia a abrir un canal de comunicación con los actores de la aviación para implementar políticas que favorezcan el crecimiento, la sostenibilidad y la seguridad jurídica. Sin un esfuerzo conjunto, Bolivia perderá la oportunidad de posicionarse como un hub clave en la región», enfatizó.
Recomendaciones y perspectivas
El informe ALTA Aviation Insight Bolivia, elaborado con datos de la plataforma Amadeus Travel Intelligence, analiza en profundidad el tráfico aéreo, las principales rutas y los aeropuertos del país. Asimismo, ofrece recomendaciones para fortalecer el sector, como la mejora de la conectividad, la reducción de costos y ajustes regulatorios que fomenten la inversión.
Aunque el panorama es complejo, la aviación sigue siendo un motor económico esencial para Bolivia. El llamado de ALTA y ALA Bolivia al gobierno busca impulsar un esfuerzo conjunto que permita superar los desafíos y liberar el potencial del sector.
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