A una semana de terminadas las elecciones generales Italianas, el futuro de la compañía de bandera entra en una etapa de definiciones. Los comisionados del proceso de administración extraordinaria habían decidido hace ya unos meses posponer cualquier definición sobre el futuro de Alitalia para después de estos comicios. La medida era lógica y necesaria, ya que avanzar con el proceso de venta o liquidación podía significar que la decisión sobre la compañía pudiera utilizarse por cualquiera de las facciones en lucha.
Ahora, el escenario político Italiano presenta un nuevo desafío: las opciones de centro quedaron muy debilitadas (Matteo Renzi, líder del Partido Democrático, debió renunciar por el escasísimo caudal de votos obtenido) y la derecha obtuvo la primera minoría, mientras que la segunda fuerza de la política Italiana es… un partido anti establishment.
Cómo influye este resultado político en el futuro de Alitalia? La Liga, sector primario de la coalición de centro derecha mayoritaria, rechaza vender la línea aérea a Lufthansa. A la Centro Izquierda le interesa avanzar sobre una participación minoritaria estatal, pero ahora su posición está bastante debilitada. Al Movimiento 5 Estrellas, segundo en las elecciones, le interesa que el estado Italiano retome el 100% del control de la empresa.
Se han estado evaluando chances de avanzar en un conglomerado con Ferrovie dello Stato, para crear una gran compañía que se complemente en la oferta doméstica, en lugar de competir por los mismos destinos. Por ahora, está en una etapa de idea. Pero suena interesante.
En el frente externo, Lufthansa sigue presionando sobre Bruselas para que la Unión Europea apure la venta. Lufthansa no niega su interés sobre la empresa, pero afirma que tiene que ser saneada in extenso. No son pocas las voces que afirman que LH quiere quedarse con algunos activos, pero no con la compañía completa.
El gran competidor de la empresa de Carsten Spohr es el nuevo conglomerado que formaron Delta, Air France, Cerberus y Easyjet. Se dice que habrían hecho una oferta por la compañía como está y que esperan la aprobación del consejo de administración para avanzar con la propuesta vinculante. Mientras tanto, Alitalia repuntó muchísimo en su operatoria y ha sido la compañía más puntual del mundo en enero.
Se especula con que el triunvirato de administración extraordinaria tomará la decisión sobre la compañía antes de fines de abril. Queda poco tiempo antes de definir quién se queda con Alitalia. Sea quien sea, deberá mantener vivo el espíritu y la imagen de una empresa emblemática de los Italianos. Eso es lo que esperamos.
Los italianos van a tener que hacerse cargo primero del tembladeral que crearon con las opciones más votadas: dos partidos antisistema, antieuropeos, antiinmigrantes, que ofrecen soluciones mágicas… En fin, lo peor que pueden hacer es frenar la venta de Alitalia ahora que es una empresa más encaminada que un año atrás. Y si la fusionan con la Ferrovia dello stato, temo por el resultado: la estatal de trenes es una empresa sólida desde siempre, pero que compite con éxito justamente con -entre otros- la oferta aerocomercial. Juntarlas?
Hola. Excelente análisis.
Siento lo mismo, hay que mantener vivo el espíritú de la aerolínea de bandera de Italia.
Muy buena nota.