El Grupo Norwegian anunció hoy que debido a la prolongación de las medidas de restricción al movimiento de personas establecidas por diferentes gobiernos para combatir la expansión del nuevo Coronavirus y al impacto que esto ha tenido en sus operaciones e ingresos, ha solicitado la bancarrota de sus filiales que operan bases de tripulantes Norwegian Pilot Services Sweden AB, Norwegian Pilot Services Denmark ApS, Norwegian Cabin Services Denmark ApS y Norwegian Air Resources Denmark LH ApS.
En paralelo, el grupo también ha cancelado los contratos de provisión de tripulantes con varias filiales de OSM Aviation, con bases en España, el Reino Unido, Finlandia, Suecia y Estados Unidos.
De manera conjunta, estas dos medidas afectarán a 1.571 pilotos y 3.134 tripulantes de cabina (los 700 pilotos y 1.300 TCP con base en Noruega, Francia e Italia no se verán afectados, aclaró la aerolínea).
Desde el Grupo Norwegian afirman que a pesar de las medidas de reducción de costos anunciadas hace un par de semanas, a los Consejos de Administración «no les ha quedado más remedio que solicitar el concurso» debido, además «a la falta de un apoyo financiero significativo por parte de los gobiernos sueco y danés».
En Noruega la situación es diferente dado que existe lo que han descrito como «un sistema eficiente de suspensión de contratos (o ERTE), lo que significa que el Gobierno corre con todos los costes salariales durante todo el período de suspensión. Desafortunadamente, una cobertura equivalente no existe ni en Suecia ni en Dinamarca».
«El impacto que el coronavirus ha tenido en la industria de la aviación no tiene precedentes. Hemos hecho todo lo posible para evitar tomar esta decisión de último recurso y hemos solicitado acceder a apoyo gubernamental tanto en Suecia como en Dinamarca”, declaró al respecto el consejero delegado de Norwegian, Jacob Schram.
“Nuestros pilotos y tripulantes de cabina son el núcleo de nuestro negocio y han hecho un trabajo fantástico durante muchos años. Es desgarrador que nuestras filiales de pilotos y tripulantes de cabina en Suecia y Dinamarca se vean ahora obligadas a declararse en concurso, y lamento mucho las consecuencias que ello tendrá para nuestros compañeros. Estamos trabajando día y noche para superar esta crisis y volver con una Norwegian más fuerte, con el objetivo de recuperar a la mayor cantidad posible de compañeros en los cielos”, concluyó Schram.
Con casi 40 millones de pasajeros transportados en 2019, Norwegian es la tercera low-cost más grande de Europa y la sexta del mundo, con una red de 500 rutas hacia más de 150 destinos. Claro, todo previo COVID-19. Una vez que pase esta tormenta, quizás vuelva como la pequeña aerolínea regional noruega que era hace 20 años.
Otra que ya no veremos más en EZE al igual que Air New Zealand. Una pena