Boeing y China Southern Airlines firmaron ayer un pedido de 12 aeronaves 787-9 Dreamliner, por un valor total de USD 3,2 mil millones a precios de lista, lo cual fortalecerá el crecimiento de la flota de largo alcance de la compañía.
China Southern Airlines fue el cliente de lanzamiento del 787 en ese país asiático, y actualmente opera 10 aeronaves de la versión 787-8, las cuales le han ayudado a lanzar seis nuevas rutas non-stop desde Guangzhou hacia Londres, Roma, Vancouver, Perth, Auckland y Christchurch.
«El 787 nos ha ayudado a lograr un éxito inmediato al implementar nuestra estrategia de internacionalización durante los últimos años y ha permitido que nuestra operación y servicios sean más atrayentes para los pasajeros», dijo Tan Wangeng, CEO de China Southern Airlines.
El 787-9 es una versión 6 metros más larga que el 787-8, con un peso máximo al despegue extra de 24.500 kilos, permitiendo llevar hasta 40 pasajeros más y carga manteniendo la performance ambiental y económica, utilizando 20% menos de combustible e igual porcentaje de reducción de emisiones en comparación con aeronaves del mismo tamaño. Al 30 de septiembre Boeing tiene 577 pedidos de este modelo, de los cuales ya han sido entregados 152. En Latinoamérica tanto Aeroméxico como LATAM Airlines Group poseen aeronaves 787-9, la primera con cuatro unidades y la segunda con 7 de un total de 19 pedidas.
China Southern Airlines es la aerolínea más grande de China en términos de flota, con 510 aeronaves tanto de Boeing, como de Airbus y Embraer.
