Boeing anunció esta semana sus números finales de pedidos y entregas de aeronaves para el año 2016.
En total se entregaron 748 aeronaves durante el año anterior, y al mismo tiempo se lograron 668 pedidos netos valuados en USD 94.1 mil millones.
De esta manera, la cartera de pedidos pendientes de entrega quedó en 5.715 aeronaves, de las cuales 4.452 son de la familia 737 (3605 MAX, 6 -700, 1 -7BBJ, 727 -800, 30 -800A y 83 -900ER), 28 de la familia 747 (9 -8 y 19 -8F), 93 de la familia 767 (23 -200 y 70 -300F), 442 de la familia 777 (107 -300ER, 29 777F y 306 777X) y 700 de la familia 787 (149 -10, 94 -8 y 457 -9).
Aunque en unas 100 aeronaves menos, la cantidad de pedidos, tanto brutos como netos se mantuvo en línea con el año anterior, bastante lejos de los récords obtenidos entre 2012 y 2014 pero aún así por arriba del promedio de los últimos 30 años.
Es interesante también recorrer cómo ha ido variando el historial de pedidos y entregas de las diferentes familias actualmente vigentes durante el mismo período:
Boeing destaca como los principales hechos del 2016 el haber realizado el primer vuelo del 737 MAX, la apertura del Composite Wing Center para el 777X en Everett y el inicio del ensamble final del 787-10 en North Charleston.
El 11 de enero Airbus divulgará su resumen del 2016 y podremos confirmar cuál de los dos grandes fabricantes ha sido el vencedor durante el año.