Boeing y COMAC (Commercial Aircraft Corporation of China) celebraron hoy la entrega de la primera aeronave salida del nuevo Centro de Terminación y Entregas del programa 737 ubicado en Zhoushan, China, producto del joint venture entre ambas empresas.
La aeronave, un 737 MAX 8, había sido ensamblada en Renton, Estados Unidos, para luego ser trasladada a Zhoushan, en donde hoy pasó a manos de Air China.
Este centro, cuya construcción se inició hace casi dos años, es el primero que Boeing desarrolla fuera de los Estados Unidos, y que sea en China marca la importancia que este mercado tiene para el futuro del fabricante, hacia donde se dirigirán alrededor del 30% de todos los 737 pedidos en el mundo hasta el momento. En los próximos 20 años ese país necesitará unos 7.680 aeronaves valuadas en USD 1.2 billones, a los que se suman USD 1.5 billones de servicios de post venta para servir a la creciente flota de aeronaves comerciales.
Las instalaciones cubren 62 mil metros cuadrados, y están diseñadas para toda la familia 737 MAX. Allí se realizarán las tareas en los interiores de la cabina y pintura del fuselaje para el mercado chino.
