El fabricante de turbohélices franco-italiano ATR presentó sus números finales para el año 2018, en los que se observa una caída en relación al año anterior, pero dentro de los objetivos previstos por la compañía en un contexto que denominaron «dificultoso».
Durante 2018 entregaron 76 aeronaves, cuatro menos que en 2017, mientras que registraron 52 nuevos pedidos en firme (32 ATR 72-600 y 20 ATR 42-600), versus las 113 del excepcional período anterior que tuvo como protagonista a la aerolínea india IndiGo con casi el 50% de los mismos.
De todas maneras lograron acaparar el 62% de los pedidos de aeronaves turbohélices de pasajeros, reforzando su posición de liderazgo en ese mercado. Mientras tanto, por tercer año consecutivo sus ingresos se mantuvieron en 1,8 mil millones de dólares.
La cartera de aeronaves pendientes de entrega garantiza unos tres años de producción, con un ratio de ventas/entregas superior a 1.
Según destacaron, en 2018 los ATR permitieron el lanzamiento de 113 nuevas rutas sirviendo a 1.346 aeropuertos alrededor del mundo, 56 más que en 2017 (podríamos contar a Reconquista, Santa Fe, entre ellos, de la mano de Avianca Argentina).
Algunos hitos alcanzados durante el año anterior fueron la entrega del ATR 72 número 1000, la de la aeronave número 500 de la serie -600, y de la número 1500 de toda la línea ATR.
También inauguraron un nuevo simulador en Toulouse y un nuevo centro de atención al cliente que funciona 24/7, y su programa de mantenimiento pay-by-the-hour logró un 15% más de clientes.
Los nuevos asientos Neo-Classic y Neo-Prestige se convirtieron en el estándar de los nuevos ATR, y se introdujo como opcional el sistema de entretenimiento a bordo vía Wi-Fi Cabinstream.
