Jueves Retro, capítulo 26: Dewoitine D.338, la esperanza es lo último que se pierde

Agustina Rota

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El Dewoitine D.338 fue un avión francés monoplano y trimotor construído por la compañía Dewoitine en el año 1935, que estuvo en producción hasta 1939. Fue un avión comercial con capacidad para transportar entre 12 y 22 pasajeros, creado para una línea aérea belga pero que terminó siendo operado por la reconocida aerolínea francesa.

La aerolínea belga, Sabena, había encargado a la compañía fabricante un avión para la ruta a realizar entre Bélgica y El Congo. Dewoitine le ofreció un trimotor con capacidad para 8 pasajeros, una versión renovada del Dewoitine D.332, pero con una estructura reforzada dado que ese ejemplar había sufrido un accidente a inicios del año. Este nuevo modelo fue bautizado como D.338 y conllevó un tiempo más prolongado que el previsto en su construcción, por lo que Sabena decidió cancelar su orden. Sosteniendo que la esperanza es lo último que se pierde, continuaron su construcción confiando en que Air France desearía comprarlo (y así fue).

El prototipo realizó su primer vuelo el 9 de agosto de 1935, presentando varias fallas e inestabilidad por la forma rectangular aplanada de su fuselaje. Cuatro meses más tarde se retomaron las pruebas, con 3 motores radiales Hispano-Suiza 9V de 660 hp y hélices de paso variable también Hispano-Suiza.

Luego de seis meses de estas pruebas, la aerolínea francesa decide incorporar el ejemplar a su flota y encarga 28 unidades más entre mayo de 1936 y julio de 1939. El primero adquirido, llamado Clémence Isaure, fue utilizado para la formación de las tripulaciones y luego realizó el primer vuelo comercial entre París y Marsella a fines del mes de junio. Esto dio origen a los servicios regulares entre Le Bourget – Lyon – Marsella con capacidad para 22 pasajeros, iniciando el 13 de julio de 1936.

Estos aviones no solo fueron operados por Air France y las Fuerzas Armadas Francesas, sino que en marzo de 1939 dos ejemplares fueron enviados a Argentina para reemplazar los D.333. Su denominación pasó a ser T-170 y T-171, siendo incorporados en la Base Aérea Militar de El Palomar y estando en servicio hasta 1947, dadas las dificultades para conseguir repuestos. Finalmente fueron transferidos al Instituto Aerotécnico y a la Dirección General de Material Aeronáutico.

Ejemplar argentino T-170

Al comenzar la Segunda Guerra Mundial, las Fuerzas Armadas Francesas solicitaron a Air France 12 D.338 para equipar sus secciones, pero fueron devueltos y reanudaron sus vuelos comerciales. La misma situación ocurrió en 1941, pero esta vez con 18 unidades, y en 1943 fue firmado un contrato de arrendamiento con Lufthansa por 8 ejemplares. Al finalizar las hostilidades, Air France recuperó 8 aviones que continuaron con su operación entre París – Niza, Túnez – Ajaccio y Marsella – Argel.

Características

El Dewoitine D.338 estaba construido completamente en metal, dando como resultado un peso vacío de 7900 kg o de 11.150 kg al transportar los 22 pasajeros y sus 3 o 4 tripulantes. Contaba con un tren de aterrizaje convencional -ocultado parcialmente en las góndolas del motor para reducir el daño de la célula en caso de aterrizaje de emergencia-, empenajes horizontales -que eran contrarrestados por dos mástiles perfilados- y un  fuselaje con forma rectangular aplanada que incorporaba aislamiento acústico y calefacción.

Sus motores de 9 cilindros Hispano-Suiza le permitían alcanzar una velocidad máxima de 301 km/h con un techo de vuelo de 4900 metros y un régimen de ascenso de 4000 metros en 30 minutos. Presentaba una longitud de 22,13 metros, una envergadura de 29,38 metros y una altura de 5,5 metros.

 

4 comentarios en «Jueves Retro, capítulo 26: Dewoitine D.338, la esperanza es lo último que se pierde»

    • Hola Mari! La última información a la que llegué es que fueron transferidos al Instituto Aerotécnico y a la Dirección General de Material Aeronáutico, tal vez hoy en día están en algún museo coleccionista pero desconozco. Saludos!

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