Turkish Airlines ha logrado evitar despidos masivos de pilotos, tripulantes de cabina y mucho personal de tierra, acordando con sus empleados una serie de recortes salariales de hasta el 50 por ciento hasta fines de 2021.
El acuerdo celebrado entre la aerolínea y el sindicato Hava-İş implica una reducción de salarios de pilotos a la mitad, para los tripulantes en un 35% mientras que el resto del personal verá sus salarios reducidos en un tercio.
A cambio, Turkish acordó no despedir a ningún empleado y así rechazar un programa de apoyo salarial del gobierno similar a las iniciativas utilizadas en Europa en respuesta a la pandemia de COVID-19.
«El hecho de que la pandemia haya llevado a las economías mundiales a un punto negativo sin precedentes en la historia se ha reflejado en las actividades comerciales y el flujo de caja de Turkish Airlines directamente», explicaron en un comunicado desde Hava-İş.
El sindicato trabó conflicto con la compañía por propuestas para recortar los salarios, pero acordó reducciones para salvar puestos de trabajo a medida que se hace evidente la escala de la crisis. Los recortes salariales temporales se revisarán cada seis meses con miras a restaurar parte o la totalidad del salario antes de fin de 2021.
El mes pasado, la autoridad de aviación civil de Turquía instó a las aerolíneas del país a despedir a los pilotos extranjeros expatriados y a la tripulación de cabina antes de despedir a los trabajadores locales.
