En lo que tal vez sea la medida más drástica tomada en la región (al menos por ahora), el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció que prohibirán el ingreso al país de todas aquellas personas que hayan estado en el Reino Unido o Sudáfrica durante los últimos 30 días, para así tratar de evitar el ingreso de una nueva cepa del COVID-19, la cual, según reportan medios internacionales, es hasta un 70% más contagiosa.
“A partir de ahora queda prohibido el ingreso a nuestro país, de cualquier persona que su itinerario de vuelo haya incluido el Reino Unido o Sudáfrica o que haya estado en alguno de esos dos países en los últimos 30 días”, afirmó Bukele.
El Salvador se suma así a las restricciones ya impuestas por otros países latinoamericanos como Argentina, Colombia y Chile, entre otros.
Hasta el momento el único requisito que solicitaba el país centroamericano para ingresar era la presentación de un certificado de test PCR con resultado negativo para COVID-19 realizado dentro de las 72 horas previas al vuelo.