Interjet posee todas sus operaciones canceladas desde el 14 de diciembre y las mantendrá así hasta fines de enero de acuerdo a sus empleados.
La aerolínea que presta servicios desde el año 2005, atribuye esta acción al Covid-19, lo cual es entendible, pero también es cierto que ya se encontraba en una situación delicada previo a la pandemia. Los viajeros que intentan adquirir pasajes a través de la página web, después de seleccionar diferentes vuelos para el mes de enero, se encuentran con la siguiente inscripción: “Ante la contingencia por el COVID-19 no operamos por el momento algunas rutas».
Según la información que publicó el diario Milenio de ese país, los empleados fueron notificados que durante enero la aerolínea no realizará ningún vuelo.
Los problemas se agudizaron a mediados de diciembre, cuando Interjet canceló sus vuelos por falta de dinero para adquirir el combustible aéreo.
Por las irregularidades que Interjet viene presentando, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) decidió suspenderla del Billing & Settlement Plan (BSP), el medio de facturación y liquidación electrónica entre las agencias de viajes y las aerolíneas.
Además los empleados reclaman que se les adeudan cuatro meses de sueldo y junto con el sindicato votarán hoy miércoles si concretarán la huelga para el 8 de enero. Todo esto se suma a una deuda por más de USD 150 millones con Aeropuertos y Servicios Auxiliales en concepto de combustible y más de USD 300 millones en rojo con el fisco.
La aerolínea no emitió ningún comunicado respecto a las cancelaciones de los vuelos y las consultas realizadas por los usuarios vía redes sociales son ignoradas completamente.