El sistema de Dominio Aéreo de Próxima Generación (NGAD, por su sigla en inglés), que será el avión de combate que reemplace eventualmente al Lockheed Martin F-22, tendrá plenas capacidades aire-aire y aire-superficie.
Airforce Magazine recoge el testimonio del Jefe de Estado Mayor de la Fuerza Aérea, General Charles Q. Brown Jr. ante el Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes, sobre la solicitud de presupuesto fiscal 2022, en la que dijo que quiere que el NGAD tenga capacidad «polivalente», enfatizando que la función principal de la aeronave será el dominio aéreoEl sistema de Dominio Aéreo de Próxima Generación (NGAD) que reemplazará al F-22, tendrá plenas capacidades aire-aire y aire-superficie. pero con la capacidad de atacar objetivos terrestres también.
Comparado con el F-22, Brown dijo que el NGAD tendrá «mayor carga de armas [y]… mayor alcance» necesario para operar en las grandes distancias requeridas en el teatro Indo-Pacífico.
El NGAD tendrá «alguna capacidad aire-tierra para asegurar, primero, que pueda sobrevivir, pero también para proporcionar opciones para nuestros comandantes de componentes aéreos y para la Fuerza Conjunta», dijo Brown, sugiriendo que el NGAD podrá disparar a los sistemas de defensa aérea que lo amenazan.
El general retirado James M. Holmes, ex integrante del Comando de Combate Aéreo, ha dicho que puede haber dos variantes de NGAD: una con largo alcance y carga útil para el Indo-Pacífico y otra orientada a los rangos relativamente cortos entre posibles áreas de batalla en Europa.
El NGAD se describe como una «familia de sistemas» que permite a la Fuerza Aérea controlar el cielo en momentos y lugares de su elección, pero su pieza central será un avión de combate.
Es probable que otras partes del sistema sean aviones de escolta no tripulados para transportar municiones adicionales y realizar otras misiones (programa Skyborg).
Durante la audiencia, Brown también confirmó que la razón de la Fuerza Aérea para no incluir más F-35 en su lista de prioridades no financiadas es que prefiere esperar a la versión más avanzada del Bloque 4 del avión.
«El F-35 que tenemos hoy no es necesariamente el F-35 que queremos tener que vaya hacia el futuro, que tendrá (el upgrade) Tech Refresh 3 y Block 4 contra una amenaza china que avanza», dijo Brown.
La USAF viene teniendo problemas para mantener la logística de su flota de F-35, ya que está resultando más cara de lo previsto.
Esta espiral de gasto ascendente hace que el modelo de sostenibilidad del F-35 se esté transformando en inasequible para la USAF.
Es por ese tema que la USAF está recortando los pedidos del F-35 para el año fiscal 2022 y posteriores.
La USAF busca presionar a Lockheed Martin para que encuentre la manera de reducir el costo logístico, que amenaza con dejar la flota de F-35 en tierra, o de lo contario buscará adquirir un nuevo avión de combate de 4.5 Gen o – 5 Gen.
Sin embargo, «incluso con la lista de prioridades no financiada, la mayoría de los nuevos cazas que vamos a comprar serán F-35», dijo Brown. Pero la Fuerza Aérea puso los elementos de mantenimiento del F-35 en la lista porque la mejora en esta área es una prioridad crítica, dijo.
Los mentados F-35 Block 4 empezarían a ser entregados a partir del 2025. Mientras tanto, con el dinero que se ahorra con los recortes del presupuesto 2022, se busca acelerar el desarrollo del NGAD, que podría tener su rollout en el 2030, y ser el primer caza de 6ta generación del mundo.
