A un año de su llegada a Brasil, el Gripen se prepara para entrar en servicio

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Hace exactamente un año, el primer caza Gripen llegó al aeropuerto internacional de Navegantes, en Santa Catarina, desde donde despegaría en su primer vuelo en suelo brasileño y el primero lejos de su Suecia natal. Ahora, 365 días después, su entrada en servicio está cada vez más cerca.

El 24 de septiembre de 2020 fuimos testigos de un movimiento diferente en el aeropuerto Vitor Konder, que normalmente es la puerta de entrada para los turistas que buscan las hermosas playas de Santa Catarina y también el Beto Carrero World, pero ese día, se escuchó un ruido diferente.

Ese sonido procedía de los motores GE F414 del avión de combate Gripen, que llegó en barco al Puerto de Navegantes, convenientemente situado cerca del aeropuerto, a poca distancia.

Tras ser preparado en un hangar privado, acostumbrado a recibir sólo aviones ejecutivos, el caza despegó por primera vez, marcando el inicio de una de las etapas más importantes del programa FX-2, que pretende renovar la «punta de lanza» de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), un verdadero «culebrón» que se arrastra desde 1995.

Burocracia y política aparte, el martillo fue finalmente golpeado en 2013, con la elección del Gripen, cuya entrega estaba prevista para 2018, pero cuyo calendario acabó retrasándose por diversos motivos, entre ellos las personalizaciones para el modelo brasileño, que cuenta con una pantalla «única» como pantalla principal, algo entonces sólo presente en el F-35 Lightning II estadounidense, de Lockheed Martin.

Con la pandemia, la demora aumentó, pero el año 2020 terminó con el Gripen con número de registro FAB-4100 ya en suelo brasileño, aunque todavía no fue entregado oficialmente a la FAB para su uso en misiones.

El avión de combate está siendo desarrollado en el país en colaboración con la empresa brasileña Embraer, y aún no ha entrado en funcionamiento, ni en Suecia ni en Brasil, estando en fase de pruebas y homologación. En los últimos 12 meses, ha realizado varios vuelos de prueba, e incluso demostraciones en Brasilia y otros lugares, para «adaptarse».

SAAB y la FAB no han revelado cuántas horas ha volado ya el primer Gripen en los cielos brasileños, pero sin duda ha superado los cientos de horas, y quienes están cerca de Gavião Peixoto lo oyen volar con mucha frecuencia.

Aunque no se ha revelado la fecha real de entrega del primer avión para misiones FAB, se espera que tenga lugar en la primera mitad del próximo año. Para entonces, habrán llegado más, y los 36 cazas se entregarán en 2027, de los cuales al menos 15 se ensamblarán en Gavião Peixoto a partir de 2023.

Para finales de este año deben llegar otros dos cazas Gripen por el Puerto de Navegantes.

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