La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) advirtió hoy que la imposición de restricciones de viaje por parte de los gobiernos, aún contra la recomendación de la Organización Mundial de la Salud, podría amenazar la recuperación de la industria aerocomercial.
Este mensaje fue dado en el marco de la presentación de los datos estadísticos de octubre de 2021, los cuales mostraron una mejora general tanto en los mercados nacionales como internacionales, siempre frente a 2020, dado que en comparación con 2019 la demanda se ubicó un 49,4% abajo.
A nivel doméstico, la demanda cayó un 21,6% frente a octubre de 2019, mejorando la caída del 24,2% de septiembre. Los mercados internacionales por su parte estuvieron 65,5% por debajo, una mejora de cuatro puntos porcentuales en comparación con la caída registrada en septiembre.
El continente americano sigue demostrando las mejores performance de recuperación, con caídas de la demanda de apenas el 26,3% en Norteamérica y 33,6% en Latinoamérica, esta última además con el mejor factor de ocupación, que se ubicó en 80,9%.
«La performance de tráfico de octubre refuerza que la gente quiere viajar cuando se lo permiten. Desafortunadamente la respuesta de los gobiernos a la variante Omicron está poniendo en riesgo la conectividad global que ha tomado tanto tiempo reconstruir», dijo Willie Walsh, Director General de IATA.
El mercado internacional de Latinoamérica cayó un 55,1% frente a octubre de 2019, una mejora de seis puntos en comparación con septiembre. La capacidad lo hizo un -52,5%, mientras que el factor de ocupación llegó al 76,9% (-4,3 pp).
En Europa el tráfico internacional cayó 50,6%, seis puntos porcentuales menos que en septiembre. La capacidad lo hizo -41,3%, mientras que el factor de ocupación se redujo en 13,7 puntos porcentuales, llegando a 72,5%.
Las aerolíneas norteamericanas registraron una caída del 55,1% en la demanda internacional, seis puntos menos que en septiembre. La capacidad cayó 52,5% y el factor de ocupación se ubicó en 76,9% (-4,3 pp).
«El levantamiento de las restricciones estadounidenses a los viajes desde unos 33 países el mes pasado generó esperanzas de que un aumento en la demanda de viajes reprimida impulsaría el tráfico durante el próximo invierno del hemisferio norte. Pero la aparición de la variante Omicron provocó el pánico en muchos gobiernos, una vez más restringiendo o eliminando por completo la libertad de viajar, a pesar de que la OMS advirtió claramente que «las prohibiciones generales de viaje no evitarán la propagación internacional y suponen una pesada carga para las vidas y los medios de subsistencia», agregó Willie Walsh.
«La lógica del consejo de la OMS se hizo evidente a los pocos días de la identificación de Omicron en Sudáfrica, con su presencia ya confirmada en todos los continentes. Las prohibiciones de viaje imprudentes son tan ineficaces como cerrar la puerta del granero después de que el caballo se ha escapado», concluyó tajante.
Cada vez más convencido de que una gran parte del problema son los políticos (de los gobiernos… pero también de la OMS). Otra parte del problema son los medios «tradicionales», generando pánico innecesario. Y además, los ciudadanos comunes, que no reaccionan ante medidas ineficaces, sin sustento científico y con controles de índole autoritario…