MTU Maintenance anunció un acuerdo con la estadounidense JetBlue que tiene por objetivo realizar pruebas y recopilar información sobre el uso de combustibles de aviación sostenible -SAF, por su sigla en inglés- en los motores V2500 que utilizan aviones de la aerolínea.
Es de suma importancia que las empresas que forman parte de la industria aerocomercial continúen aunando esfuerzos para introducir los combustibles de aviación sostenible en las operaciones. Si bien no es la solución ideal, a corto plazo el SAF puede ofrecer una importante reducción en la emisión de gases de efecto invernadero.
En relación a los combustibles fósiles convencionales, el SAF reduce las emisiones hasta en un 80% y, en general, su producción se realiza a partir de la reutilización de desechos como, por ejemplo, grasas o aceites de cocina.
Realizadas en un entorno terrestre controlado, las pruebas en los motores se llevarán a cabo inicialmente con una mezcla de combustible SAF al 10 por ciento y se pueden ampliar hasta el 50 por ciento, el límite reglamentario actual, si es necesario, según informó la compañía. Actualmente, los vuelos comerciales sólo pueden ser operados con hasta un 50% de combustible de aviación sostenible, pero todo indica que el camino hacia la certificación del 100% está bastante allanado.
Según Michael Schreyögg, director de programas de MTU Aero Engines, la compañía es la primera en el mundo en ofrecer pruebas de funcionamiento con SAF. “Estamos entusiasmados de hacer nuestra parte en la reducción de las emisiones de dióxido de carbono en nuestros sitios y brindar soluciones MRO más sostenibles para los clientes a lo largo del ciclo de vida. MTU está comprometida con el Acuerdo Climático de París y, por lo tanto, tiene como objetivo convertirse en carbono neutral en las operaciones en todas nuestras instalaciones de producción alemanas”, declaró.
En un comunicado, la compañía aseguró que comenzó a realizar pruebas con los motores V2500 en noviembre de 2021 y que espera expandirlas a otros tipos de motores, como los motores CFM56-7B y GE90.
Por su parte, Sara Bogdan, directora de Sustentabilidad y Gobernanza Social Ambiental de JetBlue, aseguró que “nuestro objetivo es lograr emisiones netas de carbono cero para 2040 e implementar iniciativas sostenibles a lo largo de la cadena de suministro, y recopilar los datos necesarios para garantizar que estas iniciativas sean seguras, prácticas y significativas, es una parte clave de este trabajo. JetBlue actualmente tiene un contrato exclusivo de trece años con MTU Maintenance para su flota preseleccionada de V2500”.
MTU es uno de los principales proveedores de MRO en el mundo. La compañía asegura estar comprometida con el futuro sostenible de la aviación, por lo que sus aportes a la incorporación de SAF en las operaciones será clave. Asimismo, desde la empresa enfatizan que “las aspiraciones de MTU como empresa industrial sostenible incluyen compras responsables y respetuosas con el medio ambiente y un entorno de trabajo seguro y atractivo (…) estamos trabajando en conceptos de propulsión revolucionarios que apuntan a una aviación climáticamente neutral en 2050”.