La llegada de más cazas Gripen a la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) puede estar más cerca de lo imaginado, y ocurriría con un segundo escuadrón.
Los nuevos cazas se unirían a los 36 del pedido original y a los cuatro anunciados en abril durante el Día de la Aviación de Combate. Los planes fueron actualizados por el Comandante de la Fuerza Aérea, Brigadier Carlos Baptista Junior, en un desayuno de trabajo con periodistas especializados, ayer lunes en Brasilia, según reporta nuestro medio asociado en Brasil, Aeroin.
Las negociaciones para los 26 cazas adicionales ya están en marcha con SAAB, y se destinarían a un segundo escuadrón, ya que los primeros 40 serán operados por el Escuadrón Jaguar, en Anapólis, sustituyendo a los actuales aviones F-5E Tiger que tienen cerca de 50 años.
Este escuadrón también es conocido por operar los cazas Mirage III y Mirage 2000, y ahora sigue la tradición del ala delta con el Gripen.
El proceso aún está en negociación, por lo que no se ha detallado cuántos de los 4 cazas adicionales, y de los posibles 26, se ensamblarán en Brasil y su fecha de entrega, pero sí se ha definido que el país sólo ensamblará la versión monoplaza (de un solo asiento), dejando los ocho aviones F-39F biplaza para su producción en Suecia.
Esta versión F-39F está destinada a la formación de pilotos, y será utilizada exclusivamente por Brasil, ya que el otro comprador, la propia Suecia, utilizará su actual JAS-93D biplace Gripen para este fin.
Teniendo en cuenta que los cazas Gripen cuestan hasta 85 millones de dólares cada uno a los precios actuales, el contrato para los 26 cazas adicionales podría ascender a 10.000 millones de reales, aunque cabe esperar descuentos.
