El fabricante aeronáutico francoitaliano ATR anunció que la primera fase del proceso de adaptación de su modelo 42-600 a STOL (Short Take-Off & Landing) está cerca de finalizar. El objetivo del proyecto es habilitar la aeronave para realizar maniobras de despegue y aterrizaje en pistas cortas.
Si bien las condiciones de operación dependen siempre de variables como el peso y la altitud del aeródromo con respecto al nivel del mar, el ATR 42-600 no está habilitado para despegar en pistas de menos de 1.107 metros de longitud o aterrizar en pistas de menos de 966 metros. Según consignó la compañía, la conversión habilitará al avión para operar en pistas de hasta 800 metros de longitud (2.625 pies).
La primera etapa del proceso comenzó en noviembre de 2021 con los trabajos en la aeronave con número de serie del fabricante (MSN, por sus siglas en inglés) 811 y matrícula F-WWLY. ATR prevé finalizarla en el transcurso de este mes, luego del primer vuelo del prototipo.
En la aeronave se reforzó la parte trasera del fuselaje, se instaló un nuevo sistema de frenado automático y se modificaron los spoilers para adaptarlos a las necesidades de reducción de la sustentación durante aterrizajes en pistas cortas. También se actualizaron todos los sistemas computarizados que controlan estos elementos.
De la primera fase participaron cuarenta personas. Trabajaron ingenieros, especialistas en metal, electricistas, mecánicos, encargados de aspectos logísticos y especialistas en calidad.
Simone Stanchi, director del Programa STOL, comentó que luego del primer vuelo comenzará la segunda etapa de la conversión, que durará hasta finales de 2022. En esa instancia se instalará un nuevo timón de dirección para finalizar la conversión total de la aeronave. Después comenzará la campaña de certificación, un requisito necesario para cualquier aeronave que atraviese un proceso de este tipo.
La conversión le dará al ATR 42-600 la posibilidad de acceder a cientos de aeropuertos regionales adicionales. Air Tahití, que opera en la Polinesia Francesa, es la primera aerolínea interesada en sumar a la variante STOL a su flota.
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