Huelgas, escasez de personal y nueva oleada de Covid: caos en los aeropuertos de Europa

Ismael Awad-Risk

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La temporada alta de viajes en Europa está siendo afectada por una oleada de huelgas e infecciones de Covid que, sumadas a la escasez latente de personal, están llevando al caos y a la cancelación de miles de vuelos, agravando la crisis del sector en el Viejo Continente.

La esperada reactivación tras la pandemia se está viendo limitada por conflictos laborales y limitaciones de la logística aeroportuaria. En los aeropuertos de Ámsterdam, Londres, Fráncfort y París se están produciendo escenas caóticas, con colas de personas que esperan durante horas solo para que se les comunique la cancelación de sus vuelos.

Sin atisbos de mejora en el corto plazo

En el horizonte solo se percibe la posibilidad de que el caos aumente. Los gremios están tratando de aprovechar la desesperación de las aerolíneas -que apuntan a una temporada récord para terminar con la racha de pérdidas económicas y comenzar a recuperar al sector de su peor crisis en un siglo- para conseguir sus objetivos de aumentos salariales que se ajusten a la inflación, mejores condiciones de trabajo, y el cumplimiento de la legislación laboral.

Los tripulantes de cabina de Ryanair en España, Portugal y Bélgica iniciaron el viernes 24 de junio una huelga de tres días. A esta se sumaron sus pares de Francia a partir del sábado, y de Italia el domingo. En un comunicado replicado por Bloomberg, la aerolínea afirmó que «menos del 2%» de sus vuelos en territorio belga fueron afectados. Los empleados españoles de Ryanair están convocados a otros tres días de huelga el viernes 1 de julio. EasyJet -eterna rival de Ryanair- también se prepara para nueve días de paros escalonados en España, a partir del 1 de julio.

Por otro lado, Aeroports De Paris, operador de los aeropuertos Charles de Gaulle (CDG) y Orly, mantiene conversaciones con los sindicatos para intentar evitar una segunda huelga, que está prevista para el viernes 1. La medida del pasado 9 de junio provocó la supresión de una cuarta parte de los vuelos en CDG, y el cierre de dos pistas. «Nos ponen en situaciones difíciles y es frustrante», señaló Ben Smith, CEO de Air France-KLM, una de las empresas más afectadas por la huelga.

Por último, el personal de tráfico de British Airways también decidió en asamblea realizar una huelga. Las fechas y modalidad de la misma se fijarán en breve, y afectarán los servicios de la aerolínea en el aeropuerto de Heathrow (Londres). En el Reino Unido, la crisis se ha visto agravada por una huelga de ferrocarriles que dificulta el acceso a los aeropuertos. La asociación de personal de transporte, gremio que nuclea a los trabajadores ferroviarios, ha advertido que Gran Bretaña se enfrenta a «un largo verano de descontento» de no mediar acuerdo.

No solo las huelgas afectan a la industria

Más allá de las huelgas, el faltante de personal están obligando a las compañías aéreas a recortar sus operaciones estivales. Lufthansa aumentó el viernes a 3.100 el número de vuelos que cancelará en julio y agosto. British Airways, que despidió alrededor de 10.000 empleados durante la pandemia, está luchando por recuperar trabajadores, encontrándose con un mercado laboral cambiado.

Desde el lado terrestre las noticias no son mejores. Gatwick (Londres) y Schiphol (Ámsterdam), dos de los mayores aeropuertos de Europa, anunciaron una limitación en las operaciones diarias que manejarán. Incluso después de esto, el aeropuerto más importante de Países Bajos se esforzaba el pasado viernes por hacer frente a la afluencia de pasajeros, con colas interminables. Para hacer lugar a los pasajeros, la terminal tuvo que instalar tiendas de campaña en el exterior del vestíbulo de partidas.

Las aerolíneas se disculpan, pero señalan que todo podría empeorar

La dirección de Lufthansa se disculpó por las interrupciones y cancelaciones que afectan al sector, y advirtió que la situación empeorará antes de mejorar. La compañía dijo que la industria aérea está alcanzando el límite de los recursos disponibles, mientras tanto aerolíneas como aeropuertos se esfuerzan por reconstruir sus operaciones tras la pandemia. «Sólo podemos pedirles disculpas por esto», dijo Lufthansa en un comunicado, publicado por Bloomberg. «Dado que el número de pasajeros sigue aumentando, es poco probable que la situación mejore, al menos a corto plazo».

Según Lufthansa -la mayor aerolínea de Europa, cabe resaltar- la mixtura es casi perfecta: una oleada de infecciones por coronavirus agravó la escasez de personal, la guerra en Ucrania ha restringido el espacio aéreo en Europa, provocando «cuellos de botella en los cielos», y las huelgas solo contribuyen al problema. La aerolínea cerró indicando que si bien el sector está buscando recontratar a miles de empleados, esto recién logrará estabilizar las operaciones durante el invierno.

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