Las negociaciones entre Lufthansa y Vereinigung Cockpit (VC) llegaron este jueves a un punto de no retorno por lo que el sindicato de pilotos alemanes convocó a una huelga a todos sus afiliados para mañana viernes 2 de septiembre, la cual afectará las partidas de Lufthansa y Lufthansa Cargo desde aeropuertos en ese país.
«Conscientes de nuestra responsabilidad con la empresa y los pasajeros, no queríamos dejar piedra sin remover y ofrecimos otra fecha de negociación a pesar de una oferta inadecuada y negociaciones fallidas. Tampoco recibimos una oferta suficiente hoy. Esto es aleccionador y una oportunidad perdida», dijo Matthias Baier, vocero de VC.
Por su parte, Michael Niggemann, director de Recursos Humanos de Lufthansa AG, dijo que «no podemos entender la convocatoria de huelga de VC. La dirección ha hecho una oferta muy buena y socialmente equilibrada, a pesar del continuo impacto de la crisis de Covid y las inciertas perspectivas de la economía mundial. Esta escalada se produce a costa de muchos miles de clientes».
Considerando la programación de la aerolínea que se visualiza en Cirium, Lufthansa tiene programadas 697 partidas desde Alemania este viernes, lo cual podría afectar alrededor de 110 mil pasajeros.
Lufthansa ha ofrecido a los pilotos un acuerdo por 18 meses que implica sumar EUR 900 a su salario en dos etapas, lo cual, enfatizaron desde la compañía, beneficiaría en particular a los pilotos ingresantes dado que se traduce, en el caso de un copiloto nuevo, en un incremento del 18% en su salario, mientras que para un capitán al tope del escalafón significa un incremento del 5%.
Para VC esto es insuficiente, dado que solicitan un aumento generalizado del 5,5% para fines de este año como primera medida, y compensaciones adicionales automáticas por sobre la inflación a partir de enero de 2023 (de hasta 1% sobre el índice reportado por el gobierno), además de una nueva escala salarial con una base mayor e incrementos en pagos por vacaciones, entrenamientos y licencia por enfermedad.
Según Lufthansa, el cumplimiento de esas demandas significaría que la nómina salarial para pilotos crecería en un 40% llegando a 2,2 mil millones de euros, algo que consideran inaceptable.
Marcel Gröls, negociador del sindicato, señaló que ambas posiciones todavía están muy separadas, y esperan que Lufthansa presente una oferta significativamente mejorada que brinde una solución a futuro en todo el escalafón.
