La Aeronáutica Civil de Colombia emitió este martes (8) un dictamen negativo sobre la integración de Avianca y Viva asegurando que el estudio que llevaron adelante concluye que la integración representa riesgos para la competencia en el sector aerocomercial y el bienestar de los consumidores.
El estudio detalla que esta integración propiciaría a generar o reforzar el poder de mercado de Avianca, Viva y Viva Air Perú considerando que participan en 59 rutas nacionales que movilizan el 93,7% del tráfico doméstico en Colombia, y que en 29 son coincidentes, además de ser las únicas en 16.
Esto llevaría, señala el estudio, a que en términos de libre competencia el mercado colombiano retroceda a niveles de hace siete años.
«Viva, que ha sido un jugador relevante del mercado colombiano, ha dinamizado la competencia en el sector y se ha convertido en una alternativa valiosa para los consumidores colombianos y de la región, desaparecería como competidor independiente», asegura Aerocivil, agregando que «otros competidores se enfrentarían a nuevas dificultades para crecer o incursionar en mercados afectados por mayores barreras de entrada y mayor poder de mercado», lo cual se podría traducir en una afectación a los consumidores dada la facilidad que tendrían Avianca y Viva para aumentar sus precios o reducir frecuencias.
A pesar de ello Aerocivil no le cierra la puerta del todo a la integración, dado que, como ha ocurrido con otras situaciones similares, las empresas pueden proponer acciones que compensen los denominados «efectos anticompetitivos» sobre el mercado. Asi también tienen la oportunidad para probar la integración de Viva se enmarca en la excepción de empresa en crisis.
Este último había sido el camino elegido por Viva, pero Aerocivil afirma que «si bien se acreditó que Viva actualmente afronta una situación financiera relevante, Avianca y Viva no probaron que la crisis económica de Viva sea de tal magnitud que afecte su viabilidad en el mercado y, por consiguiente, esté condenada a salir del mercado de manera inminente e inevitable».
Por otro lado, sigue Aerocivil, Viva no probó que haya explorado y agotado otras alternativas y que las mismas hayan resultado inviables», como por ejemplo préstamos a entidades financieras u ofertas a posibles compradores.
Así tampoco ambas empresas «no probaron que el daño a la competencia generado por la transacción era menor que aquel que provocaría la salida del mercado de Viva. Por el contrario, Avianca y Viva se limitaron a relatar los efectos de la supuesta salida del mercado de Viva, pero no compararon los mismos con los efectos que generaría la aprobación de la transacción».
De esta manera Aerocivil emite una recomendación a la ultra low cost para que «adopte las medidas internas y alternas pertinentes con el fin de superar la situación financiera que afronta actualmente».
Ambas partes tienen ahora 10 días para apelar esta medida, pero Aerocivil advirtió que «solo se aceptarán los condicionamientos que solucionen las preocupaciones de competencia de la autoridad» y que, si Avianca y Viva presentan una nueva solicitud, el análisis podrá ser actualizado y que podrán tomarse el tiempo que «resulte adecuado», lo contrario al estudio actual que se llevó con «celeridad y eficiencia debido a la urgencia manifestada» por las partes.
Avianca había realizado una oferta por Viva a finales de abril adquiriendo el 100% de los derechos económicos de la empresa en Colombia y Perú, aunque sin tener control ni administración sobre la low-cost. En agosto solicitaron la integración bajo el proceso de compañía en crisis alegando el drástico deterioro financiero de Viva en el último trimestre. Esto ocurrió apenas horas antes de que Gustavo Petro asumiera como presidente de Colombia, el primero en la historia de ese país en ser considerado de izquierda, lo que hizo temer por una posición menos pro mercado que la de sus predecesores que repercutiría negativamente sobre la integración de Avianca y Viva, lo cual, sea por esto o no, terminó por cumplirse.
Sorpresa en Viva
Tras conocerse la decisión de Aerocivil, desde Viva emitieron un comunicado manifestando que la han recibido «de forma respetuosa, pero con sorpresa».
«Bajo las sugerencias entregadas por la Autoridad al dar su concepto, revisaremos las alternativas que nos presentan, dado que esta alianza es necesaria para la continuidad de
Viva, seguir potenciando la conectividad aérea del país a precios bajos y la fuente de trabajo de los más de 5.000 colaboradores directos e indirectos de Viva», prosiguieron.
«Por nuestra parte, y mientras se estudian las posibilidades que como compañía tenemos para la revisión de esta decisión, seguiremos operando como lo hemos hecho a lo largo de nuestros diez años de operaciones, y en estos últimos meses a pesar del difícil entorno macroeconómico que enfrentamos, comprometidos con promover la inclusión aérea en Colombia y la región, de la mano de nuestro modelo ´Súper Bajo Costo´ que ha generado mayores niveles de conectividad y desarrollo para el país y la región», concluyeron desde la ultra-low cost.
