Air Malta se disolverá a finales de 2023, de acuerdo con un reporte del periódico maltés The Shift. La Comisión Europea rechazaría la petición del gobierno maltés, para inyectar capital en la compañía, que enfrenta una difícil situación económica agravada desde 2020.
Ver también: Wizz Air está interesada en abrir una filial en Malta
Una nueva aerolínea nacional sustituiría a Air Malta
El propio director general de la empresa, David Curmi, confirmó hoy que una nueva compañía nacional sustituirá a Air Malta.
Los funcionarios gubernamentales, que tiempo atrás habían solicitado a las autoridades europeas 290 millones de euros para rescatar a la empresa, ahora discuten sobre cómo establecer una aerolínea de bandera sucesora que sea viable desde el punto de vista comercial.
Según declaraciones de Curmi al Times of Malta, todos los empleados serán despedidos, pero podrán solicitar su incorporación a la nueva compañía. Los directivos remarcaron que todos los empleados actuales recibirán las indemnizaciones correspondientes.
Si bien Air Malta contaba con una plantilla de más de mil trabajadores, en el último tiempo redujo su personal y actualmente emplea a 330 personas. En su momento, la reducción de la plantilla se planteó como una de las últimas alternativas para mantener las operaciones. Además, entre otras medidas, los servicios de asistencia en tierra se subcontrataron.
Para los clientes, en cambio, la transición debería ser más fluida. En ese sentido, Curmi sostuvo que Air Malta continuará su actividad hasta que la nueva aerolínea esté lista para tomar el relevo y ofrecer servicios regulares a través de su propia plataforma de reservas.
Una transición al estilo de Alitalia
El escenario recuerda a la transformación de Alitalia en ITA Airways, concretada en 2021. De hecho, el propio Curmi se expresó a favor de emular lo hecho por el gobierno italiano, que llegó a un acuerdo con la Comisión Europea para reemplazar su aerolínea de bandera por una nueva marca que tomó sus activos.
A mediados de 2022 se conoció que el gobierno maltés consideraba disolver Air Malta y transferir los activos rentables a una nueva compañía aérea estatal. Meses después, Curmi confirmó la existencia del plan alternativo para que las instituciones supranacionales aportaran el dinero necesario para mantenerla a flote.
Sin embargo, la empresa ya recibió una ayuda similar en 2016, y las normativas de la Unión Europea en materia de rescate y reestructuración estipulan que sólo puede concederse una vez en un período de diez años.