El presidente Joe Biden ataría la aprobación de la venta de los F-16 Block 70 y 80 kits de modernización Viper a Turquía, a cambio de que Erdogan levante su objeción al ingreso de Suecia en la OTAN.
Según Reuters, el presidente norteamericano llamó a Recep Tayyip Erdoğan para felicitarlo por su reelección. En dicha conversación, el presidente turco volvió a insistirle a su par norteamericano para que acelere la aprobación de la venta de 40 F-16 Block 70 nuevos y 80 kits de modernización para llevar los F-16 de bloques anteriores al estándar Viper, un negocio con un valor potencial de 20.000 millones de dólares. Biden se comprometió a volver a hablar con él sobre ese tema, al tiempo que también le expresó su deseo de que Turquía retire su veto a la enterada de Suecia en la OTAN.
«Hablé con Erdogan. He felicitado a Erdogan. Sigue queriendo trabajar en algo sobre los F-16. Le dije que queríamos un acuerdo con Suecia, así que vamos a conseguirlo. Así que volveremos a estar en contacto», declaró Biden a los periodistas reunidos ante la Casa Blanca.
A la pregunta de si esperaba algún movimiento por parte de Erdogan sobre el ingreso de Suecia en la OTAN, Biden respondió: «He planteado esa cuestión con él. Hablaremos más de ello la semana que viene».
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Una negociación delicada
Suecia y Finlandia solicitaron el ingreso en la OTAN el año pasado, abandonando sus históricas políticas de no alineamiento militar tras la invasión rusa de Ucrania. Las solicitudes de ingreso deben ser aprobadas por todos los miembros de la OTAN, y Turquía había atado su aprobación a la concreción de la venta de los F-16.
Es importante recordar que las relaciones entre Washington y Ankara pasan por uno de sus peores momentos a raíz de la adquisición por parte de Turquía del sistema de defensa aérea ruso S-400, pese a las objeciones norteamericanas. Tras años de negociaciones y amenazas, Turquía siguió adelante con la incorporación de los sistemas rusos, y esto le valió su expulsión del programa F-35 y la imposición de sanciones militares y económicas.
Luego de que Finlandia levantara sus restricciones a la venta de armas impuestas a Turquía, tras su invasión de Siria en 2019, Ankara permitió su ingreso a la OTAN el mes pasado. Pero las objeciones al ingreso de Suecia continúan, ya que, según Ankara, el país nórdico acoge a miembros de grupos armados que considera «terroristas».
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Alternativas al F-16
En septiembre del año pasado, ante la falta de avance en las negociaciones por la venta de los F-16, el presidente Erdoga señaló que “no es solo Estados Unidos el que vende aviones de combate en el mundo. Inglaterra vende, Francia vende, Rusia vende, es posible obtenerlo desde cualquier lugar. Para esto, hay algunos que ya nos envían señales”.
Si bien hoy la opción rusa resulta del todo imposible, y el Rafale francés parece un candidato improbable (dado a que fue vendido a Grecia y que París mantiene una política confrontativa a los intereses turcos en el Egeo), Reino Unido podría posicionar su Eurofighter como una alternativa válida para Ankara.