Tres países de la OTAN adquieren municiones merodeadoras ROTEM israelíes

Gastón Dubois

ROTEM

Israel Aerospace Industries informó que firmó contratos con tres países de la OTAN para suministrar el sistema de munición de merodeadora (o drones suicidas) ROTEM.

Tras el reciente anuncio de que Estonia, miembro de la OTAN, realizó una importante compra de municiones merodeadoras de largo alcance de Israel Aerospace Industries (IAI), la empresa firmó contratos por separado con otros tres países de la OTAN por valor de varios millones de dólares para el suministro de sistemas Rotem.

ROTEM en vuelo. Foto: IAI

ROTEM es una munición táctica merodeadora de despegue y aterrizaje vertical (VTOL) única y probada en combate, destinada a ser utilizada por las fuerzas especiales de los clientes y que también puede servir para fines de ensayo y evaluación.

ROTEM forma parte de la familia de municiones de merodeo de IAI, que incluye Harpy, Harop y Mini-Harpy, y fue probada en combate en diferentes ocasiones desde 2019.

Características

El sistema ROTEM es eficaz hasta una distancia de diez kilómetros y fue diseñado para ser desplegado por un soldado individual a nivel de infantería o de pequeñas unidades/fuerzas especiales. Su funcionamiento sencillo y su diseño robusto lo hacen muy rentable. Permite a los soldados individuales obtener una visión elevada de la zona que les rodea, mirar por encima de las colinas o dentro de un entorno urbano y más allá de la línea de visión. El soldado puede entonces atacar al enemigo en cuanto aparecen los objetivos.

Un soldado puede llevar la mochila con dos drones ROTEM, su unidad de control y baterías de repuesto. Foto: IAI

ROTEM lleva sensores electroópticos diurnos y nocturnos para dar a las unidades tácticas sobre el terreno una ventaja contra los adversarios, actuando como sensor y como arma de oportunidad. A diferencia de los misiles o cohetes, puede lanzarse para buscar un objetivo, pero se desarma si no se recibe autorización para atacar. Si esto ocurre, ROTEM puede regresar volando para ser recuperado de forma segura, sustituir su batería y ser desplegado inmediatamente en una nueva misión.

Con una autonomía de vuelo de 30 minutos (portando una cabeza de guerra de 1.2 kg), o pudiendo permanecer en misión hasta 3 horas equipado solo con carga de reconocimiento (contando con las baterías extra en la mochila del operador), Rotem puede planear sobre un edificio alto o una colina, con una cámara abierta y un enlace de datos, mientras espera a que aparezca el objetivo. Una vez detectado el objetivo, ROTEM puede atacar al instante.

Deja un comentario