United Airlines reportó un sólido rendimiento financiero en el segundo trimestre de 2023, subrayando una notable recuperación y perspectivas optimistas para el resto del año. La compañía informó ganancias trimestrales por acción de $3.24, un margen ajustado antes de impuestos del 15.3%, y récords ajustados de ganancias por acción de $5.03. Este rendimiento financiero, que supera el objetivo anual de la compañía para 2023, ha fortalecido los esfuerzos de United Airlines para restaurar su balance y, según la compañía, refleja el impacto positivo de la estrategia United Next.
United Airlines ha atribuido su desempeño en el segundo trimestre a la fortaleza de su red. La compañía reportó un retorno a los niveles de 2019 en los márgenes domésticos y un aumento en los márgenes internacionales. También se informó un significativo aumento del 27% en la capacidad internacional. Aprovechando este impulso, United Airlines planea capitalizar aún más la demanda de viajes internacionales con nuevos vuelos a Manila, Hong Kong, Taipei y Tokio, mejorando su presencia en la región del Pacífico.
“Hemos resistido una serie de eventos sin precedentes y ahora estamos enfocados en mejoras significativas, particularmente en Newark, para servir mejor a nuestros clientes“, dijo el CEO de United Airlines, Scott Kirby. “El éxito de United Next es evidente en nuestros resultados del segundo trimestre, y seguimos dedicados a ejecutar nuestra estrategia para ofrecer beneficios significativos para nuestros clientes, empleados y accionistas“, agregó.
El segundo trimestre también trajo un aumento del 17.5% en la capacidad y un aumento del 17.1% en los ingresos operativos totales en comparación con el Q2 de 2022. Sin embargo, los Ingresos Totales por Asiento Disponible por Milla (TRASM) disminuyeron un 0.4%, mientras que el Costo por Asiento Disponible por Milla (CASM) se redujo un 4.0%. Los ingresos netos antes de impuestos de United para el trimestre fueron de $1.4 mil millones, con un margen antes de impuestos del 9.8%. Los ingresos netos ajustados se informaron en $1.7 mil millones. La compañía también señaló que su deuda neta ajustada a EBITDAR ajustado de los últimos doce meses ha vuelto a los niveles de 2019, situándose en 2.4x.
Además de sus logros financieros, United también introdujo varias mejoras y avances operacionales. La compañía lanzó una herramienta de autoservicio en su aplicación, proporcionando a los pasajeros opciones de rebooking personalizadas, información de seguimiento de equipaje y vales para comidas y hoteles cuando sea necesario. La aerolínea también introdujo una mezcla de combustible de aviación sostenible (SAF) en los vuelos de salida del Aeropuerto Internacional de San Francisco, convirtiéndolo en el tercer aeropuerto donde United utiliza SAF.
El rendimiento operativo de United vio un aumento significativo, con un promedio diario de más de 2,400 vuelos, marcando el volumen más alto de vuelos principales en un trimestre en la historia de la compañía.
Con la implementación de la estrategia United Next y un firme control del mercado, la perspectiva de United Airlines para 2023 parece prometedora. La compañía espera informar ganancias ajustadas por acción de $11 a $12 para todo el año, por encima de la guía previa de $10 a $12.
Resultados operacionales
United Airlines transportó 41,9 millones de pasajeros en el segundo trimestre de 2023, cifra 10,6% superior a la del mismo período de 2022. La capacidad, medida en ASM, creció 17,5%, mientras que la demanda, en RPM, lo hizo 17%, dando como resultado un factor de ocupación de 86,4% (-0,3 pp).
Nuevos destinos
En términos de expansión de su red, United ha lanzado seis nuevas rutas transatlánticas internacionales entre Málaga, España y Newark/Nueva York, Estocolmo, Suecia y Newark/Nueva York, Berlín, Alemania y Washington D.C., Barcelona, España y Chicago, Shannon, Irlanda y Chicago, y Roma, Italia y San Francisco.
La aerolínea también anunció lo que definieron como la mayor expansión en la historia de la aviación en el Pacífico Sur, con servicio directo a Christchurch, Nueva Zelanda desde los Estados Unidos Continentales, vía San Francisco, y dos nuevas rutas entre Los Ángeles y Auckland, Nueva Zelanda y Brisbane, Australia (sujeto a aprobación gubernamental).
