La Fuerza Aérea Brasileña ha llegado a un acuerdo con Embraer para llevar a cabo la modernización de media vida (MLU) de su flota de 68 aviones A-29A/B Super Tucano.
Durante la 54ª edición del Salón Aeronáutico Internacional de París, la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) y Embraer habían anunciado el inicio de los estudios para la modernización de media vida (MLU) del avión A-29 Super Tucano. La actualización se centraría en la implementación de un sistema de aviónica de quinta generación con capacidad de expansión, en actualizar los sistemas de navegación y comunicación, en la ampliación de los sistemas de armas disponibles y en modernizar los sensores de vigilancia y autoprotección de la aeronave.
A-29 Super Tucano MLU
Si bien los A-29 son aeronaves relativamente jóvenes (los primeros ejemplares entraron en servicio en la FAB en 2004) y cuentan con aviónica y equipos análogos a los de un avión de combate de cuarta generación, el paquete de Modernización de Media Vida (MLU) propuesto por Embraer tiene como objetivo agregar algunas tecnologías de combate de quinta generación, aumentando la flexibilidad operativa y la modularidad de los sistemas.
Según el sitio especializado Tecnología & Defesa, la modernización de los Super Tucano de la FAB incluirá un paquete más amplio para los A-29 que equipan los escuadrones enfocados en misiones operativas (como ataque ligero, vigilancia e interceptación aérea y contrainsurgencia) y uno más sencillo para los que se utilizan para entrenar pilotos de caza.
El upgrade podría incluir la renovación completa del cockpit con la instalación del Wide Area Display (WAD), el Head-up Display (HUD) y el Helmet Mounted Display del casco que produce localmente la firma AEL Sistemas para el programa F-39 Gipen. También se modernizarán los sistemas de comunicación -con la posibilidad de incluir un enlace de datos de alta velocidad- la capacidad ISR, los sistemas de auto-defensa (chaff/flare) y se buscaría expandir la gama de armas guiadas que puede utilizar el avión.
Como entrenador avanzado, que tiene que garantizar una correcta transición hacia los cazas de 4.5 generación (como el Gripen) y a la 5ta generación (pensando en el desarrollo del A-29N para la NATO), los aviones modernizados para la FAB podrían adoptar el mismo paquete de entrenamiento sintético instalado en los Super Tucanos operados por Chile y Ecuador.
Estos sistemas de entrenamiento sintético permiten simular el uso de radar, sistemas de guerra electrónica y misiles aire-aire y aire-tierra, entre otras capacidades, posibilitando al piloto entrenarse en tácticas de combate modernas y complejas, pero a una fracción del costo operativo.