Histórico vuelo del XB-1 que acelera y avanza hacia Mach 1

El XB-1 sigue avanzando hacia Mach 1. A partir del histórico primer vuelo del 22 de marzo de 2024, el avión de demostración de Boom avanza en su programa de pruebas de vuelo para confirmar su rendimiento y sus cualidades de manejo, con aproximadamente 10 vuelos subsónicos planificados antes de alcanzar velocidades supersónicas.

La aeronave sienta las bases para el diseño y desarrollo de Overture, el avión supersónico de Boom y aprovecha tecnologías de última generación para permitir un vuelo supersónico eficiente, incluida una aerodinámica optimizada digitalmente, compuestos de fibra de carbono, entradas de aire para motores supersónicos avanzados y un sistema de visión de realidad aumentada para la visibilidad en el despegue y el aterrizaje.

Apenas ocho días después de su tercer vuelo de prueba, el XB-1 completó con éxito su cuarto (y más rápido) vuelo de prueba el 21 de septiembre de 2024. Durante este vuelo, alcanzó las velocidades más altas hasta el momento a Mach 0,617, o 313 nudos de velocidad aerodinámica indicada, más de la mitad del camino para romper la barrera del sonido a Mach 1.

Este vuelo marca el primer uso del sistema de excitación de vibraciones (FES) en vuelo. El FES es un dispositivo de vibración que podemos activar para alcanzar deliberadamente modos de vibración estructural antes de que los encontremos de forma natural en vuelo.

Además de comprobar las cualidades básicas de manejo del avión a distintas velocidades entre 225 y 300 nudos, el equipo llevó al XB-1 hasta 2,78 g (o fuerza g), utilizando una técnica de prueba de vuelo llamada viraje ascendente para aplicar fuerzas g elevadas al avión. Esta es la máxima que pretendemos ver durante el programa de pruebas de vuelo del XB-1. Cuando lleguemos al vuelo supersónico, el XB-1 tendrá que realizar un viraje a 2 g para alinearse para el vuelo supersónico; el equipo está probando el avión con un margen adicional para aumentar la seguridad.

El tren de aterrizaje se retrajo a una velocidad máxima de 225 nudos, completando así esta parte de la prueba del sistema. Durante los vuelos de prueba futuros, el equipo retraerá el tren de aterrizaje inmediatamente después del despegue.

El vuelo alcanzó una altitud máxima de 16.150 pies, con un tiempo total de vuelo de 48 minutos. El XB-1 fue pilotado por el piloto de pruebas jefe de Boom, Tristan «Geppetto» Brandenburg, quien realizó el segundo y tercer vuelo del XB-1 y también pilotará el primer vuelo supersónico del avión.

Durante este vuelo, el equipo continuó probando sistemas clave y su rendimiento a medida que expanden sistemáticamente la envolvente de vuelo. El piloto, Geppetto, llevó al XB-1 a las actitudes máximas de cabeceo y guiñada que esperamos ver en vuelo. Estas pruebas se realizaron a una altitud más alta y segura para garantizar que no hubiera problemas de manejo inesperados. Hacemos este tipo de pruebas para que la primera vez que ocurran, no sea en una fase crítica del vuelo.

El equipo también verificó el rendimiento del sistema de control ambiental (ECS), que controla la temperatura y la presurización de la cabina. Esta prueba tiene como objetivo garantizar que el ECS esté funcionando como está diseñado antes de que el XB-1 se eleve a mayores altitudes, donde hace más frío y la presión es menor. El tren de aterrizaje se extendió y retrajo a velocidades más altas que en vuelos anteriores (215 nudos), lo que marca el segundo de los tres pasos para llegar a la velocidad máxima segura para subir y bajar el tren, que es de 225 nudos. Además, el equipo continuó probando el sistema de aumento de estabilidad.